El Obispado de Córdoba y el Ayuntamiento de Espejo firmaron el pasado día 6 la cesión del uso de la ermita de Santa Rita, en un convenio que permitirá al Consistorio espejeño darle uso durante los próximos 25 años, que podrían ser prorrogables, según un comunicado remitido a este periódico por el Obispado. De este modo, la ermita del siglo XVII podrá utilizarse para eventos socioculturales, además de religiosos.
En la firma han estado presentes el propio obispo, Demetrio Fernández González; el párroco de Espejo, Francisco García Velasco; el alcalde de Espejo, Florentino Santos Santos (PSOE); el Ecónomo Diocesano, José Luis Vidal Soler, y otros miembros de la Corporación municipal.
Erigida en el siglo XVII, se trata de un edificio de una sola nave, hoy cerrado al culto, con cúpula rebajada, sobre pechinas, en la capilla mayor. Fue ampliada en 1784 gracias a Manuel de Gracia, que costeó su ampliación por medio de una capilla lateral de grandes dimensiones donde estaba entronizada la imagen de Santa Rita. Se accede al interior de esta capilla bajo un arco de medio punto sobre semicolumnas toscanas. La puerta de ingreso es simple, adintelada, con jambas y dintel de piedra y rematada por una cornisa de arranques de frontón en los extremos. Está bellamente rematada por una típica espadaña, hoy sin esquila.
Según la tradición popular local, los mozos y mozas iban a esta ermita a tirarle piedras pequeñas a la santa, y si le daban en el ombligo se casaban ese mismo año y si no, había que esperar al año siguiente.
