CRITICAN LA FALTA DE TALANTE NEGOCIADOR DEL CONSORCIO PROVINCIAL

CSIF califica de inexplicable que la dirección haya impuesto por decreto los cuadrantes de este año de los trabajadores de prevención y extinción de incendios

Recuerda que este asunto siempre ha sido consensuado entre la empresa y los representantes laborales

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photo_camera Imagen de un simulacro de incendios

La Central Sindical Independiente y de Funcionarios, CSIF, de Córdoba, critica el “escaso talante negociador” de la dirección del Consorcio Provincial de Prevención y Extinción de Incendios al imponer por decreto los cuadrantes laborales para este año. El sindicato considera “inexplicable” que el organismo dependiente de la Diputación haya optado por esta vía en lugar de aprobar la propuesta consensuada unánimemente por todos los sindicatos.

El delegado de CSIF en la Junta de Personal del Consorcio, Alfonso Rosero, asegura que los cuadrantes siempre habían sido aprobados por consenso, por lo que “no entendemos este cambio de criterio en un aspecto tan importante como éste, muchos menos en un contexto político como el actual en el que las demandas de diálogo son constantes por parte del PSOE, un partido que luego en las administraciones locales donde gobierna, como es el caso de la Diputación, y más concretamente el Consorcio, actúa por imposición”.

Desde CSIF se informa de que la dirección del Consorcio, ante la falta de efectivos, ha decidido alterar la turnicidad de sus trabajadores a fin de reforzar el servicio con más bomberos en determinados meses, menguando el número de empleados en otros periodos. “Sin duda, esta reducción de personal en algunas partes del año pone en peligro la eficacia de un servicio público tan importante para la ciudadanía de la provincia como es el que presta el Consorcio en la prevención y extinción de incendios, en el salvamento y en las actuaciones en catástrofes naturales (riadas, por ejemplo)”, destaca Rosero.

El representante de CSIF en la Junta de Personal del Consorcio se hace eco del “enorme malestar y descontento” entre los trabajadores por esta decisión de la dirección que “atenta directamente contra la conciliación de la vida familiar y laboral y eterniza el problema de la falta de efectivos en este servicio público”.