Aceites basados en monovarietales por separado de hojiblanca y picuda como principal novedad y otro aceite mucho más afrutado de lo normal (de la variedad picual), generan esta temporada en la cooperativa La Aurora un punto de inflexión al buscar los casi 800 socios que tiene esta entidad un producto de mejor calidad en una época lastrada por la crisis económica a causa del coronavirus.
"Los tres monovarietales tendrán un ligero filtrado para quitarle lo más basto", ha explicado el presidente de la cooperativa La Aurora, Antonio López Pérez-Barquero, que explica que además las botellas de cristal y su presentación suponen otra novedad (medio litro y un litro, al margen de una garrafa de dos litros para la picual). "Se puede decir que picudo y hojiblanco en el mes de octubre nunca se había cogido, lo hemos adelantado para obtener un aceite más afrutado". Eso en cuanto al caso concreto de esta cooperativa, además en general el caso de la picuda temprana es mucho menos habitual en cualquier molino.
Aromas de tomatera y pimiento verde suponen para el presidente una ventaja indudable sobre los aceites procedentes de una recogida más tardía, ya en noviembre o incluso en diciembre cuando, como explica "sale el típico aceite dorado, más plano y mucho más pobre en la nariz".
La Aurora solía abrir su molino en torno al 15 de noviembre. Esta vez lo ha hecho el 27 de octubre. Para obtener esos aromas López apuesta decididamente por hacer el trabajo entre San Rafael y El Pilar. Esta recogida temprana ha sido posible gracias a las lluvias, que han hecho que los olivos "se recuperen del estrés hídrico, pues incluso la aceituna estaba ya un poco arrugada"
El presidente de la cooperativa ha añadido que ya han procesado 800.000 kilos de aceituna. "Si esto sigue así nos pondremos en millón y medio de kilos la semana que viene si el tiempo nos deja".
La cooperativa ha publicado en su canal de Youtube un vídeo sobre esta labor: 'Verde que te quiero verde'.
