La situación de crisis por la pandemia nacional está sacando lo mejor y lo peor de cada uno. Y frente a los insolidarios que se saltan el estado de alarma, los hay, y en una cifra mayor de lo que uno pudiera pensar, quienes dedican su tiempo y su hacienda, con un enorme sacrificio, a poner su granito de arena para solventar los mejor posible la situación.
Tal y como ha adelantado el Día de Córdoba, en el municipio cordobés de Villa del Río hay un grupo interesante de empresas que en lugar de cruzarse de brazos han optado por ayudar en la elaboración de mascarillas, trajes de protección, guantes y colchones para los centros y personal sanitario de la provincia.
Son Contexsur, que es la que tuvo esta iniciativa, Espumacor, Tapizados Zen, Confort Relax, Estilo Textil y Ferrexport. El Ayuntamiento, por su parte, actúa de elemento difusor para exteriorizar la iniciativa.
Según ha explicado a EFE Antonio Palomino, responsable de la firma Espumacor, que entre el lunes y el miércoles pasado han repartido 180 colchones elaborados de forma altruista para los hospitales que los necesiten, "nuestra oferta de colaborar es totalmente sincera", aún a pesar del ERTE que ha tenido que poner en marca entre sus empleados.
Ni un colchón vendido
De él salió también la idea de contactar con el PP local para que, a su vez, el partido se pusiera en contacto con el Gobierno autonómico y explicarle que había un colectivo de villarrenses que estaba dispuestos a colaborar y se ponían a su disposición.
Teniendo en cuenta que lleva días "sin vender ni un colchón", que se ha visto obligado a recortar su plantilla, que no hay ingresos "porque hay mucha gente con mucha cara que no paga" y que la economía está doblemente parada para un autónomo como él, ¿por qué lo ha hecho?
"El que siembra, recoge", señala. Y es el mismo pensamiento que planteó Ana María Molleja, de Contexsur, cuando fue la primera en poner en marcha esta iniciativa. Además, "es mejor hacer algo que estar parado y sin hacer nada". Y para ello, Antonio Palomino cuenta con "gente muy competente" que "me apoyan y entienden perfectamente la situación" y que no han dudado en apuntarse a esta aventura, incluidos los que forman parte del ERTE.
Mascarillas y trajes
Los colchones son una parte del todo. "Ya hemos confeccionado 60.000 mascarillas y 400 trajes de protección, con la colaboración de muchísimas personas del pueblo que se han puesto a coser pensando en los demás".
Antes de esta nueva crisis Espumacor, que el próximo martes, 31, cumple exactamente 13 años de existencia, iba bastante bien, con una producción de 200 colchones mensuales, daba empleo a unas 30 familias del pueblo y de Córdoba capital, donde tiene parte de su infraestructura en el Polígono Los Quintos.
Se dedica a elaborar colchones viscolásticos, almohadas, así como espumas y rellenos, surtiendo de este material a empresas, que, a su vez, venden en toda Andalucía a hospitales y centros o grandes superficies.
Ahora, con la crisis, y una vez que se salga de ella, Antonio Palomino tiene la esperanza de demostrar a la gente que los empresarios "no somos ni explotadores como están vendiendo que somos ni los ogros del país, y ahora somos precisamente los que estamos vendidos", además de que con todo lo que está pasando, "al final vamos a ver claramente quién es productivo y quién no y quién vive de las subvenciones y ayudas y quién de su trabajo y esfuerzo", asegura. Entre tanto, con la solidaridad por delante.
