El Ayuntamiento de Guadalcázar, en la Vega del Guadalquivir, mantiene su interés en recuperar sus tradiciones y entre ellas, este Sábado Santo recupera una de las que lleva en el olvido más de 70 años, se trata de la Fiesta del Judas.
Esta fiesta tradicional llegó a perderse por falta de interés en la sociedad local y ahora, desde la Delegación de Cultura del Ayuntamiento de Guadalcázar, se está dando un nuevo impulso a esta tradición con la intención de recuperarla y conservarla, a la vez que enseñar el significado de dicho día a las nuevas generaciones.
Esta fiesta no ha tenido una fecha concreta en el calendario, ya que existen dudas de si se realizaba el Domingo de Piñata o el Domingo de Resurrección. Esta última fecha es la que parece que coge más fuerza entre los mayores de la localidad y entre lo que ya existe como tradiciones en otros municipios y recogido en la literatura tradicional. Por eso, se ha elegido este sábado, 30 de marzo, para celebrar la fiesta.
Se trata de una tradición local de algunos pueblos españoles e iberoamericanos, en los que preferentemente el Domingo de Resurrección, se apedrea, lincha o quema un muñeco que representa a Judas Iscariote por su traición a Cristo.
En Guadalcázar, este muñeco lo elaboran los propios vecinos con ropa viejas y relleno de serrín, paja o cartón y porta un cartel con el nombre de Judas.
La idea y petición del Consistorio es que todos los vecinos y vecinas lleven en un papel apuntado aquellas cosas a las que quieren quemar en la hoguera con el Judas para alejarlos o evitar que ocurra, como ocurre con la traición de San Juan en la que el fuego elimina lo viso y lo purifica para abrir la puerta a lo nuevo.