El Área Sanitaria Sur de Córdoba ha llevado a cabo la formación anual correspondiente a los Equipos de Segunda Intervención (ESIS), contemplados en el plan de autoprotección. Esta formación ha sido recibida tanto por profesionales que ya formaban parte de estos equipos como por los nuevos miembros que se han incorporado, un total de 28 pertenecientes a las categorías profesionales de mantenimiento, vigilantes de seguridad y celadores.
Los Equipos de Segunda Intervención, designados por el presidente del comité de autoprotección del centro, el director económico administrativo y de servicios generales, Diego Pajares, son aquellos cuyos componentes poseen formación y adiestramiento adecuados para actuar cuando, dada su gravedad, la emergencia no pueda ser controlada por los equipos de primera intervención y para prestar apoyo a los servicios exteriores cuando sea necesario.
La docencia ha sido impartida por el jefe de turno del Parque Comarcal de Bomberos de Lucena-Cabra, Francisco León, y el jefe de equipos de segunda intervención del Área Sanitaria Sur de Córdoba, Antonio Ruiz Moya.
Esta formación consta de una parte teórica donde se abordan temas como son, funciones del plan de autoprotección, medios de extinción, equipos de protección, la teoría del fuego, etcétera, y una práctica en la que se forma a los profesionales en cómo usar los equipos de respiración autónoma y de equipos de protección, la extinción con boca de incendios equipadas y como orientarse sin visibilidad.
Prácticas de extinción
Las prácticas de extinción se efectuaron en las instalaciones del parque comarcal de bomberos Lucena-Cabra con la colaboración activa en estas actividades de los responsables provinciales de bomberos.
El plan de autoprotección es un documento que establece el marco orgánico y funcional previsto para una actividad, centro, establecimiento, espacio, instalación o dependencia, con el objeto de prevenir y controlar los riesgos sobre las personas y los bienes y dar respuesta adecuada a las posibles situaciones de emergencia, en la zona bajo la responsabilidad del titular.
La implantación del plan comprende formación y capacitación del personal, el establecimiento de mecanismos de información al público y la provisión de los medios y recursos precisa para la aplicabilidad del plan, así como la realización de ejercicios y simulacros periódicos, en su caso.
