Distrito Noroeste

La UCO descarta al mosquito tigre en Moreras y plantea un solución estructural contra la plaga

Desde 2017 el doctor Rafael Obregón Romero realiza informes de esta barriada con densidades siempre "altas" y la necesidad de que la AVRA arregle los problemas de humedades bajo los bloques
Efectos de los mosquitos en un adulto
photo_camera Efecto de las picaduras de mosquito en una persona adulta de Las Moreras

Si hay algo que hay que dejar claro en el barrio de Las Moreras es que allí "no hay mosquitos tigre", aunque sí una densidad "alta, mucho mayor que en otras zonas de la capital que hemos estudiado" de estos molestos insectos y con varias especies diferentes, lo que explicaría por qué los hay de un tamaño mayor y otros con una talla más común y moderada.

Son palabras del doctor Rafael Obregón Romero, investigador en entomología ecológica de la UCO y responsable de la parte universitaria en el convenio firmado con Sadeco para el control y seguimiento de plagas con insectos hematófagos, que no sólo afectan a mosquitos, sino también a moscas negras y ceratopogónidos (las chinches o beatillas, para entenderse), con quienes lleva trabajando desde 2016 y que continuará hasta 2021 tras haberse prorrogado recientemente esa fructífera colaboración por otros tres años más.

A pesar de ello, los primeros avisos por mosquitos llegados de Las Moreras fueron de 2017, año en que la UCO se personó por vez primera en la zona, si bien al año siguiente se intensificaron los muestreos y ahora en 2019, "estuvimos hace unos 10 días recogiendo muestras en el Patio La Voz del Pueblo", ha señalado para confirmar lo adelantado ya por este periódico. En los tres casos, los informes indican una "densidad alta" de mosquitos, pero no ha ido tampoco en aumento año tras año.

Mosquito de la barriada de Las Moreras

El motivo para el profesor está bastante claro. "Se debe a la acumulación de agua sucia bajo los edificios", que es la delicia del mosquito común, culex, o de su primo el culex zeta, que es un poco mayor que el anterior de tamaño, pero no del mosquito tigre (aedes albopictus), que prefiérenos claramente "las aguas más limpias del riego de jardines con vegetación que existen en las urbanizaciones, es más de exterior y suele picar abiertamente de día", en palabras de Obregón Romero.

Precisamente, si estos mosquitos comunes y zeta están picando también de día es porque cuando los interiores de las casas se quedan en penumbra, algo muy normal en verano, cuando se evita al luz directa del sol para amortiguar el calor, las viviendas muestran. un ambiente similar a la noche.

En cuanto a las ronchas que provocan sus picaduras, especialmente en niños pequeños y personas más mayores, se deben, según este doctor a las reacciones de las proteínas que inyecta el mosquito para alimentarse de sangre, como anticoagulantes y anestésicos, y que dependen de cada persona. Por lo general, esas ronchas le suelen salir a quienes tienen más problemas de circulación, pero no son porque los insectos que hay en Moreras sea el famoso tigre.

Sadeco

El motivo de esa densidad elevada, según este experto el Departamento Botánica, Ecología y Fisiología Vegetal de la UCO, son los bajantes rotos que provocan la acumulación de esas aguas, en parte fecales, por lo que la solución a este problema que se arrastra e años atrás es el arreglo de esos bajantes que evitaría la acumulación del agua en las cocheras y semisótanos, con ello que el número de insectos hematófagos "se reduciría bastante".

De todos modos, según Rafael Obregón, el problema, en principio, no se va a extender de Las Moreras hacia fuera, por ser esos problemas estructurales antes citados la causa de la masiva presencia de mosquitos en la barriada, que es similar a la que se produjo en Las Palmeras entre septiembre y octubre de 2018 igualmente por acumulación de agua bajo los edificios y que a día de hoy ya se ha resuelto. "Desde entonces no hemos vuelto a tener más avisos de esa zona de la ciudad".

Mosquito de Las M loreras

Lo que se debería de hacer, y es algo que el doctor incluye en sus informes, es que tenga lugar una intervención estructural en la barriada, por parte de la Junta, más concretamente de la Agencia de la Vivienda y Rehabilitación de Andalucía (AVRA), porque esas aguas son un problema de salud pública.

En cuanto al mosquito tigre, en efecto se ha localizado en la capital, en el sector Norte, no en el Centro ni cerca Del Río ni en barriadas, sino en una franja de la Campiña, con entre cinco o seis avisos diarios, aunque no todos ellos detectan a un tigre. "Lo que estamos haciendo¡, en primer lugar, es aportar información para que los supuestamente afectados por ese insecto puedan comunicarlo en el buzón del ciudadano, y trabajar para erradicarlo". Se detectó por vez primera en octubre de 2018 y como es muy difícil eliminarlo se ha prorrogado el convenio con Sadeco por otros tres años.