La cementera Cosmos ya no podrá realizar incineraciones de residuos, como pretendía la empresa para ampliar su actual actividad, ni tampoco tiene clara su continuidad en su actual ubicación del polígono de Chinales. Prácticamente eso es lo que se puede deducir de las palabras de esta mañana del presidente de la Gerencia de Urbanismo, Pedro García (IU), sobre los pasos que pretende dar el Ayuntamiento para determinar, en primer lugar, dónde se pueden realizar esas prácticas en la ciudad de Córdoba y, en segundo lugar, modificar el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) a fin de que el terreno correspondiente a Chinales Este tenga otra calificación, “en la que el suelo residencial sea compatible con el uso industrial de bajo impacto”, ya que se va a incluir la coletilla “para favorecer el bienestar de la población”.
El primero de los pasos, que implicar regular la actividad de incineración, hasta la fecha sin tocarse en ninguna normativa, requiere la suspensión de licencias para las industrias que quieran realizar esta actividad durante un año. Plazo en el que “detectaremos previamente dónde se puede permitir la quema de residuos en el término de Córdoba”, ha añadido García.
En este sentido, tanto él como el gerente de la Gerencia, Emilio García, han informado que ni Cosmos había pedido la citada licencia de nueva actividad ni hay tampoco “que sepamos” más industrias que pretendan llevar a cabo en Córdoba la incineración de residuos. Es más, el primer teniente de alcalde ha dejado claro que la cementera “ya no tendrá tiempo de pedir licencia”, porque se aprobará en el consejo de la gerencia el próximo miércoles, lo que equivale a decir que nunca la va a tener, a no ser que se mude a otra zona.
Industrias del cobre
De igual modo, la medida afectará a todo tipo de industrias que pretenda en su día poner en marcha una incineradora, como bien podría ser el caso de las industrias de cobre que están asentadas en la capital, aunque, por el momento, nadie más que Cosmos ha informado pùblicamente de esa intención.
Precisamente, preguntado concretamente sobre ese punto, es decir si Cosmos renunciara a incinerar residuos, “la empresa podría quedarse en su actual ubicación realizando su actividad actual”, ha apuntado García. Pero ¿por cuanto tiempo?
Ahí entra la segunda fase del proceso tendente a modificar el PGOU. Se trata de modificar sensiblemente el uso del terreno actual donde se asienta la empresa y eso quiere decir que, en cualquier caso, se va a quedar fuera de ordenación.
Evidentemente, a la larga, Cosmos tendrá que mudarse, pero, según ha dado a entender el gerente de Urbanismo, no hay prisas para ello. De hecho, puso el ejemplo de otro edificio que está también fuera de uso, el de los almacenes Zafra Polo, en Claudio Marcelo, y que durante años ejerció su actividad en esa situación. “Es una actividad que tiene su caducidad y no se eternizará en el tiempo, pero algún día habrá que aplicarla” y Cosmos tendrá que marcharse de allí, ha abundado Emilio García.
El concejal de Urbanismo ha informado también que la semana pasada, el viernes, mantuvo una reunión con representantes de la empresa y ha avanzado que existe buena sintonía” entre las partes.
