Las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE), que se incluyen en la Ordenanza de Circulación, Seguridad Vial y Movilidad Sostenible que se lleva hoy al Pleno extraordinario del Ayuntamiento, permite a una serie de vehículos entrar sin restricciones, mientras que para casos puntuales prevé exenciones a la norma.
Así, por ejemplo, los vehículos que pueden entrar libremente son los ciclos y bicicletas y los vehículos de movilidad personal eléctricos, los de motor con distintivo ambiental 0 y ECO, los vehículos que tengan cualquier distintivo ambiental que acudan a un Parking para cuyo acceso o salida sea necesario transitar la ZBE y los vehículos autorizados a circular por la zona A.CI.RE.
En cuanto a las exenciones la lista es, quizá, un pelín larga. Por lo pronto, pueden acceder, como es lógico, los residentes de las ZBE y los que tengan garajes en esos espacios. En este punto, en efecto funcionan como una ACIRE.
Otras exenciones son aquellos vehículos declarados registralmente de propiedad del titular de tarjeta de persona de movilidad reducida (PMR) o con el que se desplace habitualmente, lo conduzca o no, siempre que tenga situada bien visible la tarjeta en el parabrisas del vehículo. A esto se le añaden los vehículos encargados del traslado de personas con movilidad reducida o personas que acudan a tratamientos médicos dentro de la ZBE, pero, eso sí, previa autorización.
Como dato anecdótico, podrían entrar los VTC (si los hubiera en Córdoba) y, por descontado, los taxis. Pero también los servicios públicos de emergencia (ambulancias, policía o bomberos) y los servicios públicos municipales (Sadeco, Emacsa y demás).
La exención llega, igualmente, a la clientela de establecimientos hoteleros (es de suponer que de todo tipo), a los proveedores de negocios (carga y descarga) o las empresas de reparto a domicilio.
También pueden entrar las empresas de construcción, instalación y mantenimiento cuando estén realizando trabajos en edificios de las ZBE. Pero siempre que exista necesidad justificada de entrada de vehículos y que la entrada no se pueda realizar por otras vías alternativas.
Pueden entrar los vehículos declarados como históricos por la normativa de la DGT, a pesar de ser muy contaminantes, precisamente por su antigüedad, y también los de autoescuelas ubicadas en la ZBE destinados a prácticas de conducción (pero no especifica si el resto de autoescuelas de la ciudad pueden usar ese escenario para las prácticas, si bien todo apunta a que no).
De igual modo las ZBE están abiertas a la entrada de los vehículos de transporte de dinero y valores (para entidades bancarias o particulares) y las grúas para el remolque de vehículos y vehículos taller y auxilio en la vía pública.
El hecho de que se permita la circulación de vehículos autorizados a zona ACIRE aumenta la lista a transporte urbano colectivo de viajeros y escolar, de tipología compatible con el Casco Histórico; coches de caballo con licencia municipal; vehículos oficiales; residentes con atención familiar por dependencia o propietarios de inmuebles.
Y si algo no queda suficientemente claro es si se permite el paso de motocicletas ni motos (que sí pueden en zona ACIRE), ya que la medida de las ZBE no se aplica por el volumen de un vehículo, sino por la contaminación que emiten. Tampoco se especifica si estos espacios van a necesitar la instalación de pilonas escamoteables.
