Vientos aparte, que seguirán presentes a lo largo de la semana, aunque, al parecer, con algo menos de intensidad que ayer, el otro gran protagonista (meteorológico) va a ser el frío. Para aquellos que añoran los inviernos fríos y los veranos cálidos, sin anomalías ni mezclas, esta semana parece dedicada a ellos. Según la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), las temperaturas experimentarán un descenso hasta llegar a mínimas de 0 grados, el miércoles, mientras que las máximas se quedarán en 12 grados.
No es el caso de hoy, que será muy similar a la jornada de ayer en ese sentido (6 de mínima y 15 de máxima), con la diferencia de que la lluvia podría no dar la cara esta vez. La web del organismo público indica que esa escasa posibilidad (un 35%) tendría lugar entre el mediodía y las seis de la tarde, con vientos de unos 15 kilómetros por hora, aunque a lo largo de la jornada predominarán los intercambios de claros y nubes con esporádicas apariciones del sol.
Al avanzar la semana, los vientos aumentan de intensidad, hasta los 25 kilómetros por hora (con rachas máximas de 45 kilómetros, que siguen requiriendo algo de precaución), y baja el mercurio unos tres grados por arriba y por abajo, coincidiendo con cielos casi por completo despejados. Eso será mañana, martes, hasta que el día 16 el termómetro podría quedarse en los 0 grados y máximas de 12.
El jueves puede convertirse de nuevo en el día de las lluvias. La AEMET apunta, a día de hoy, un 100% de probabilidades, es decir que caerá agua sí o sí (hasta 2,4 litros por metro cuadrado, según eltiempo.es), con una cota de nieve de 900 metros (la capital se sitúa a 120 metros y Santa María de Trassierra, a 453), con lo que, por ejemplo, de llover sobre el pico de La Tiñosa, en la comarca de la Subbética, bien podría terminar tiñiéndose de color blanco. Al día siguiente, viernes, descienden bruscamente las opciones para que se produzcan precipitaciones y el termómetros oscilará entre los 4 de mínima y los 12 de máxima, aunque se esperan rachas de viento de hasta 50 kilómetros por hora, similar, por tanto, a la jornada del sábado.
