UGT Córdoba ha manifestado su solidaridad con los agentes de la Guardia Civil ante el inminente encarcelamiento de uno de sus miembros tras la aplicación del código militar por una falta ocurrida hace más de ocho años, cuando el agente estaba fuera de servicio. Un hecho anacrónico que, para el sindicato, representa una muestra más de la urgencia que supone la desmilitarización del cuerpo de la Guardia Civil.
De esta forma, el agente Luis Miguel P.S. ya ha recibido la notificación de su ingreso en menos de 15 días en el penal militar de Alcalá de Henares, donde cumplirá una condena de siete meses y un día por una discusión que tuvo lugar entre compañeros, ambos fuera de servicio y en fiestas, cuyas responsabilidades ya se dirimieron en su momento dentro del ámbito disciplinario del cuerpo, con la consecuente pérdida de destino del trabajador. Sin embargo, lejos de conformarse con este castigo, ya suficientemente duro, la maquinaria de la justicia militar ahora le priva de su libertad.
Así, ocho años después de los hechos, Luis Miguel -que desde entonces ha seguido realizando su trabajo con normalidad en su nuevo destino- tendrá que entrar en la cárcel como un delincuente a causa de una simple desavenencia con un compañero fuera de su lugar de trabajo y de su cometido profesional.
UGT Córdoba considera que situaciones como ésta vuelven a abrir el debate sobre la desmilitarización de la Guardia Civil. Este sindicato opina, desde el total respeto a la institución, que estas acciones disciplinarias están fuera de toda lógica y justicia en el siglo XXI, siendo la labor de estos compañeros y compañeras similar a la que vienen realizando otros cuerpos de seguridad, como puede ser la Policía Nacional o Policía Local.
Por todos estos motivos, UGT Córdoba manifiesta su apoyo y solidaridad con los compañeros y compañeras de la Guardia Civil, mostrando su total desacuerdo a la aplicación de sanciones anacrónicas, más acordes a tiempos pasados que deberían estar superados.
