Efemérides cordobesas

Tal día como hoy, de 1963, el estadio de El Arcángel parecía una vía de Venecia

También en 1957 un temporal de viento y agua causa nueve heridos, algunos de ellos graves, por el derribo de muros en la ciudad
El estadio de El Arcángel hasta arriba de agua FOTO Twitter de Olimpia
photo_camera El estadio de El Arcángel hasta arriba de agua FOTO Twitter de Olympia

Volvemos a hablar de inundaciones un día más, porque tal día como hoy de 1963, cayó tanta agua en Córdoba que el antiguo estadio de El Arcángel acabó bajo las aguas como si fuera Venecia, según señala la web Cordobapedia.

Fue un domingo, y ese año resultó ser especialmente lluvioso. Tanto que también la Feria de Nuestra Señora de la Salud, ya en mayo, también resultó un fracaso por la cantidad de agua caída y por la fuerza del viento que sopló en esos días. Para hacerse una idea, esa Feria se empapó durante cuatro largos días hasta que se acumularon 165 litros portero cuadrado.

Volviendo al 17 de febrero, ya el río Guadalquivir llegaba enfurecido, casi tapando los ojos del Puente Romano. Desde diciembre anterior había estado lloviendo en plan diluvio y los pantanos de Jaén habían desembolsado para evitar problemas (¿les suena un poco a lo ocurrido en 2010, sólo que con muchos más pantanos desembalsando ahora que entonces?).

Según la edición correspondiente del Diario Córdoba, el Guadalquivir iba siete metros por encima de lo habitual, con un caudal de 5.400 metros cúbicos por segundo (la media anual normal es de 150 metros cúbicos por segundo) y la riada fue inevitable.

Aparte de El Arcángel, las aguas provocaron desastres por todas partes, con unas 300 familias evacuadas en el Campo de La Verdad y otras 171 en Villarrubia, se inundó el Aeropuerto, Majaneque y Encinarejo, una chabola se vino abajo y mató a una persona y dos heridos más en el Zumbaron, además de 150 viviendas derrumbadas y otras 184 calificadas de ruina técnica.

Un auténtico desastre que también tuvo su reflejo en el fútbol. Tal y como estaba el estadio, el partido de Primera División entre el Córdoba y el Real Zaragoza se tuvo que suspender.

Esta efeméride también va ligada a otro recuerdo penoso de índole climática. En esta ocasión, en 1957 un violento temporal de viento y agua derrumbó varias casa, con el resultado de nueve personas heridas, algunas de ellas con graves lesiones.

A nivel político, llega a la Alcaldía impulsado por el régimen franquista en 1944, mientras todavía sonaban en Europa las bombas de la II Guerra Mundial, Antonio Luna Fernández, quien fue capaz de revitalizar las arcas municipales (con 21 millones de pesetas libres de cargos) que recibió totalmente enfermas y hasta se atrevió, a base de créditos, a ejecutar obras y servicios, tales como el de Abastecimiento de Aguas, el Archivo Histórico Provincial, el Hospital Municipal, un seguro de enfermedad, la primera capa asfáltica en la Avenida de Medina Azahara, un primer presupuesto para el actual edificio municipal de Capitulares, colocación de pavimentos y ornamentación en las principales calles de la ciudad, la ampliación de la fachada del Ayuntamiento hasta la Plaza de El Salvador o un estudio para el proyecto de unas lonjas de abastecimiento.