El colectivo Stop Desahucios de córdoba ha acusado al Ayuntamiento de caer en la "autocomplacencia" en materia de emergencia habitacional, ya que, si bien al principio del mandato, coincidiendo con Rafael Del Castillo como concejal, "se hacía actuaciones a buen ritmo", ahora "son muy escasas", en palabras de Nuria Torres, portavoz de esta organización sin animo de lucro.
Stop Desahucios ha puesto como ejemplo de esta desidia la propia actitud de la alcaldesa, Isabel Ambrosio (PSOE), con quien mantuvieron una reunión hace dos años en la que se comprometió a dar una respuesta en breve a los problemas de emergencia habitacional que tienen diferentes familias en la ciudad. "No recibimos entonces respuesta y en marzo de 2018 solicitamos cita de nuevo, pero seguimos sin que nos digan nada de nada".
El caso es que el Ayuntamiento adquirió un compromiso en 2016 para crear una comisión de seguimiento y trabajo en materia de política de vivienda y social, que implicaba sendas reuniones con la Junta, que es la Administración que mas competencias tiene al respecto, y la Diputación. Pues bien, "ni se creó esa comisión ni se han reunido las tres administraciones en estos tres años y medio y a puto de cerrarse el mandato no vemos visos de que vaya a crearse".
Por otra parte, desde que se trasladó desde Gran Capitán al estadio de El Arcángel la Oficina Municipal en Defensa de la Vivienda, "se ha perdido accesibilidad para la ciudadanía". Se trataba, además, de un cambio provisional, pero al no haber fecha de traslado definitivo "asumimos que seguirá así", con el problema añadido de que únicamente tiene allí trabajando a una trabajadora social, "con lo cual las citas se demoran demasiado tiempo". La media es de entre cuatro y siete meses, según Nuria Torre.
Aunque Stop Desahucios reconoce que el Consistorio tiene limitaciones en materia de vivienda, "sorprende" que la regidora haya dejado de tener entre sus prioridades la emergencia habitacional, y "necesitamos que tengamos de nuevo una interlocución adecuada para aminorar los problemas de emergencia habitacional", que han cambiado el perfil de los que la sufren, ya que si antes los lanzamientos eran por ejecución hipotecaria, ahora son por alquiler, tanto por parte de propietarios particulares como de alquileres sociales y "fondos buitres que están desahuciando".
