Después de que en noviembre pasado la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir, organismo público dependiente del Ministerio para La Transición Ecológica y el Reto Demográfico, prohibiera usar agua para el baldeo de calles debido a la sequía, cuestión que, según la presidenta de Sadeco, Isabel Albás, se hacía antes "en toda la ciudad", el Ayuntamiento cumple con esa obligación, aunque ha desvelado que se ha producido una limpieza húmeda en algunas partes concretas de la ciudad, especialmente en el Casco Histórico, y siempre con agua no potable.
Se trata de lo que Albás ha denominado como "punto negros" de suciedad que se acumulan especialmente en zonas de ocio, donde se concentra un gran número de personas, como son el Mirador del Rio, Turruñuelos, Mirabueno o la Zona Centro. Algo que se lleva a cabo mediante equipos de baldeo mecánicos, limpieza húmeda o limpieza de alta presión y equipos de limpieza manual (sopladoras, desbrozadoras y cepillos) y carritos de limpieza.
En este sentido, Albás ha explicado que Sadeco va por los diferentes barrios y distritos con el Servicio Educativo de la empresa pública para escuchar a la ciudadanía sobre sus principales problemas en materia de limpieza y también para analizar in situ cuáles son las zonas con mayor suciedad concentrada de modo que se pueda actuar de forma especial allí.
Aparte de eso, a lo largo del mes de julio se ha prestado el servicio de limpieza en los distritos Poniente Norte y Sureste, la Zona de Norte-Sierra Sur, El Brillante, casi la totalidad de la Zona Centro y todas las barriadas periféricas. Ahora, en agosto, el plan intensivo hace hincapié en la zona Centro Este, en Norte-Sierra Centro y era Distrito Noroeste, iniciando de manera simultánea la limpieza de los polígonos industriales.
"Para septiembre finalizaremos el plan en la zona de Levante y Poniente Sur", ha abundado la edil de la formación naranja.
Por otro lado, a principios de julio pasado Sadeco presentó un "plan intensivo de limpieza" formado por cinco equipos de trabajo que cubrían toda la ciudad, desde el casco urbano, los polígonos industriales y también las barriadas periféricas. Con ese plan se pretende eliminar el impacto de las malas hierbas y la suciedad que habían invadido las calles y que se había agravado por la falta de agua para baldear. Así, se han "eliminado las hierbas de los alcorques y acerados y se ha unido una limpieza intensiva de vía pública y solares municipales, así como de 5.000 contenedores y 7.000 papeleras", ha señalado Albás.
Fruto de esta actuación, se ha logrado reducir la presencia de mosquitos y otros insectos, además de malos olores.
Para ello se ha contado con un equipo de 70 operarios de limpieza coordinados por los mandos intermedios de Sadeco, con los que han colaborado, asimismo, Prode para alcorques y jardines y Contener para la limpieza de contenedores. En todos los casos, los horarios han sido desde la 06.00 horas de la mañana hasta las horas de máximo calor para retomar el servicio por la noche.
Según Albás, un estudio de la OCU ha determinado que Córdoba está entre las cinco ciudades españolas donde más calidad de vida hay, y es la primera de Andalucía, y una de las cuestiones que más se ha valorado para ello es la evacuación de residuos, "que lo hace Sadeco y por ellos nos sentimos orgullosos de nuestros trabajo".
