A efectos prácticos, las elecciones generales las ha vuelto a ganar el PP de Mariano Rajoy, que se queda con 123 escaños, tras haber obtenido el respaldo del 28,71% de los españoles, frente a un PSOE que no termina de germinar bajo el mando de Pedro Sánchez, y que ha acabado obteniendo 90 escaños, con el 22,02% de los escrutinios. Los "ganadores" de las elecciones en realidad han acabado experimentando una bajada de casi 3,7 millones de votos en comparación con 2011. Pero los socialistas tampoco se quedan atrás. Así el partido de Sánchez ha bajado en cuatro años en casi 1,5 millones de votos. Evidentemente, quienes han salido ganando de esta auténtica sangría han sido Podemos, tercera fuerza nacional, con el 12,66% de los votos (3.170.916), si bien en otras circunscripciones se presentaban en coalición (En Común Podem, Compromiso-Podemos y En Marea), con lo que sumarían 69 escaños y 5,2 millones de votos, y Ciudadanos, la cuarta, a pesar de haber obtenido el 13,93% de los votos (3.490.382).
En la provincia de Córdoba, sin embargo, la cosa cambia. Aquí, el PSOE ha vuelto a ser la fuerza más votada, con el 32,06% de los votos, que en números redondos suponen 149.628 sufragios. Evidentemente, la segunda fuerza más votada en la provincia ha sido el PP, con 141.917, el 30,41%, si bien ambos partidos han experimentado una auténtica sangría de votos; los primeros de 21.000 votos y los segundos, de más de 67.000 papeletas y envían dos escaños cada uno: María Jesús Serrano y Antonio Hurtado, por los socialistas y José Antonio Nieto y Rafael Merino, por los populares.
Eso significa que los otros dos partidos en liza, Podemos y Ciudadanos han sido los grandes beneficiarios de este resultado. Y es que Podemos en Córdoba se nutre de la pérdida de votos del PSOE y de los 8.500 de IU, y muy probablemente también del voto joven. Ciudadanos se lleva casi 56.000 votos de los cordobeses y se asienta como cuarta fuerza. Por ello los de Podemos enviarán desde Córdoba a Marta Domínguez y Ciudadanos, a Marcial Gómez. Por su parte, UPyD prácticamente desaparece de las preferencias de los cordobeses, y se queda con poco más de 2.000 votos. Por cierto, la participación es un punto y medio porcentual más alta, con 471.203 votantes, gracias a un último achuchón entre las 18.00 y las 20.00 horas.
Cuando ya se había escrutado más del 94% de los votos, el coordinador provincial de IU en Córdoba, Pedro García, salió a hablar en la sede de su partido para destacar que la provincia de Córdoba, con sus más de 36.000 votos, "es la provincia del país que más ha votado" a Unidad Popular-IU, a pesar de que en estos comicios y durante la campaña "cuatro partidos han tratado de sacarnos del panorama mediático".
García, además, ha querido destacar que IU es a día de hoy "la quinta fuerza" política de la provincia de Córdoba. Por su parte, la candidata al Congreso,, Antonia Parrado, se ha limitado a apuntar que "no es un resultado satisfactorio, pero tenemos que valorar el esfuerzo y el trabajo que se ha realizado".
Marta Domínguez, muy escueta
Entre tanto, la candidata de Podemos por Córdoba al Congreso, Marta Domínguez, prácticamente se ha limitado a apuntar que "hemos consolidado los resultados en Córdoba", aunque no ha podido evitar un cierto tono amargo al apuntar que "habíamos salido para ganar" y no ha sido ése el resultado.
Quienes se hicieron de rogar fueron los líderes locales de PP y PSOE, quienes prefirieron esperar a que comparecieran primero sus respectivos líderes nacionales por televisión antes de ponerse ellos ante los micrófonos. José Antonio Nieto, del Pp, fue el primero en comentar los resultados y lo hizo diciendo que "casi se ha llegado al reto y al objetivo que nos marcamos en Córdoba y podemos terminar con la cabeza muy alta, porque hemos afrontado los retos con honradez; hemos sabido dar la cara y aquí hay fuerza".
Nieto ha abundado en que se ha quedado en la provincia a un punto del PSOE, con lo que "la provincia está recibiendo ya nuestro mensaje, algo se está moviendo y vamos a seguir trabajando por nuestros votantes". En cuanto al panorama nacional, Nieto mostró sus esperanzas en que "haya altura de miras en los dirigentes nacionales de este país y confío en que no tengamos que vernos dentro de pocos meses otra vez, porque no haya habido capacidad para entender los retos que tiene este país por delante, y deseo y espero que se forme un Gobierno estable y que siga siendo referente en Europa".
Juan Pablo Durán
"Espero que este nuevo Parlamento, con una composición tan plural, permita darle un aire distinto y un impulso de cambio, aunque sea de forma conjunta, entre muchos, será bueno que así ocurra", dijo el secretario provincial del PSOE, Juan Pablo Durán, que señaló que "les exijo a todos y me exijo a mí mismo responsabilidad para saber gestionar los resultados".
En este sentido, pidió que "no se intente vetar y bloquear", porque "eso no es ser plural, para eso no han votado los ciudadanos", sino que "hoy tienen la obligación de ser responsables porque este país necesitará un Gobierno cuanto antes", porque este país no puede permitirse "no tener Gobierno".
"Ahora le corresponde al partido más votado dar el primer paso hacia adelante", apuntó Durán, quien hizo hincapié en que "lo que sí tenemos claro los socialistas es que vamos a seguir dando pasos hacia adelante”, porque “nos presentamos a las elecciones para intentar mejorar la vida de los ciudadanos”.
En cuanto al Senado, Córdoba ha querido dar un vuelco a su anterior votación, y mientras en 2011 envió a Madrid a tres representantes del Pp y uno del PSOE, en esta ocasión las cifras son las contrarias. Los socialistas José Manuel Mármol Servián, María de la Salud Navajas González y Juan Díaz Caballero, así como la popular Beatriz Jurado representarán a la provincia en la Cámara senatorial. Para ello el PSOE obtuvo 411.000 votos, mientras que el PP logró 390.000.
