La protesta de los parcelistas del Higuerón ha obligado, una vez más, a desalojar el salón de plenos del ayuntamiento de Córdoba. Antes del comienzo de la sesión plenaria, dos representes del colectivo de parcelistas, encabezados por su portavoz, Rafael Salazar, han intentado acceder hasta el asiento que ocupa la alcaldesa de Córdoba, Isabel Ambrosio, para hacerle entrega de una botella de agua. Tras la imposibilidad de iniciar la sesión, los manifestantes han sido desalojados de la sala, con la consecuencia de que todos los asistentes, entre los que se incluían miembros de la plataforma Stop Desahucios, y trabajadores de Cosmos, también ha tenido que abandonarla. Esto ha provocado un desencuentro entre los allí presentes que no entendían porqué debian marcharse, por lo que han pedido a los parcelistas moderación ya que su actitud estaba yendo en contra de todos.
Tras abandonar el salón de plenos, y tras un cuarto de hora en el pasillo, donde han continuado con los gritos de "agua agua", los manifestantes han vuelto a acceder al interior de la sala donde han permanecido en silencio el resto de la sesión.
