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Podemos acusa a la directiva de Aucorsa de mostrar un "nulo talante" para negociar el convenio

La portavoz, Cristina Pedrajas, recuerda al "cogobierno de derechas" que en 2022 se permite una tasa de reposición del 110% y no habrá excusas para ampliar la plantilla
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photo_camera Protesta de trabajadores de Aucorsa por la paralización del convenio

El Grupo Municipal de Podemos Córdoba en el Ayuntamiento ha calificado, a través de su portavoz, Cristina Pedrajas, de "nulo talante negociador" el que han mostrado tanto la gerente de Aucorsa, Ana Tamayo, como el presidente de la empresa municipal pública, Miguel Ángel Torrico, para tratar de desbloquear unas tensa situación que ha desembocado en paros parciales iniciados el lunes y que se prolongarán, si nadie lo remedia hasta el miércoles.

Es más, en opinión de Pedrajas, "si el presidente se hubiese preocupado por llevar a buen termino las negociaciones, en lugar de dejarlas únicamente en manos de la gerente, posiblemente los trabajadores y trabajadoras no habrían llegado a esta medida extrema".

Y es que el comité de empresa lleva desde 2019 intentando negociar y ya en la mesa negociadora se acordó que habría dos reuniones mensuales para tratar de llegar a un acuerdo. Pues bien, en todo 2021 sólo se han mantenido ocho reuniones, la última de ellas el pasado 26 de noviembre. El caso es que hay motivos de sobra para llegar a un acuerdo, porque el convenio colectivo caducó ya el 31 de diciembre de 2019, "pero la Gerencia no demuestra interés alguno por negociar otro nuevo acorde a las nuevas circunstancias sociolaborales", ha indicado la portavoz de la formación morada.

En este sentido, Pedrajas ha explicado que la mayor indignación de los trabajadores y trabajadoras es la discriminación con respecto a las demás empresas municipales en cuanto al cómputo de horas semanales. En la nefasta reforma laboral se decretó una subida desde las 35 hasta a las 37,5 horas, pero en 2018 todas las demás empresas ya habían vuelto a los valores originales, salvo Aucorsa.

"Nos consta que en el anterior mandato de PSOE e IU ya se realizó un esfuerzo grande para rebajar ese número de horas, pero este otro gobierno de derechas no ha hecho nada al respecto en estos casi tres últimos años", ha añadido la edil.

Y la principal causa de este problema es la más que acuciante falta de personal que hay en Aucorsa. En dos años se ha pasado de 412 a 397 trabajadores y trabajadores. De haberse mantenido esos 15 empleos ahora perdidos se podría haber rebajado algo esas horas semanales, así como otros problemas que arrastra la empresa pública.

 "Para 2022, los  Presupuestos Generales del Estado (PGE) permitirán una tasa de reposición del 110%, por tanto ya no tiene por qué haber excusas para recuperar en esta empresa el número mínimo necesario de puestos de trabajo, y esperemos que este gobierno haga sus tareas y no siga mirando para otro lado con lo que eso conlleva de maltrato directo y desprecio hacia la plantilla".

La gerente, Ana Tamayo, siempre se queja de que uno de los problemas que padece la empresa es el absentismo laboral. Desde este grupo no se quiere justificar esa situación, pero sí es capaz de intuir la causa principal que lleva a esa situación: Durante seis días seguidos los conductores y conductoras de Aucorsa permanecen al volante entre ocho horas y media y ocho horas y 45 minutos diarios.

"Habría que imaginarse lo que dirían los pasajeros de un avión si se les dijera que el piloto que los va a llevar está literalmente agotado de tantos días y horas seguidos de trabajo; el autobús conlleva un riesgo similar, porque en manos de esos conductores y conductoras están las vidas de sus pasajeros", ha indicado como ejemplo Cristina Pedrajas. En este caso, toda esa carga de trabajo implica una "fatiga insufrible, lesiones de columna y un mayor riesgo de accidentes, como mínimo".

A eso hay que añadir que los conductores y conductoras están recurriendo a trabajar en jornada partida, con listas de espera de hasta 60 personas de plantilla, aunque pasen más horas diarias pendientes del trabajo, con el único fin de disminuir los riesgos laborales, "dado que la empresa no pone remedio alguno".

La situación se agrava por el hecho de que los reconocimientos médicos rutinarios no son anuales como deberían ser, y es porque no existen relevos para quienes tienen que ir al centro médico. Hay, además, seis puestos de apoyo en talleres para trabajadores, sobre todo conductores que por diferentes patologías no pueden estar al volante. Pues bien, en estos momentos sólo hay dos, con cuatro vacantes "que son graciosa y arbitrariamente adjudicadas por la Gerencia". 

No hace falta recordarle a nadie que estamos en plena pandemia y que se han producido en Aucorsa también bajas por Covid-19. En estos casos, según ha recordado Pedrajas, se han dejado de cubrir servicios, ya que no se pagan horas extras a empleados y empleadas para cubrir esas carencias.

La falta de personal afecta a todo. La conciliación familiar brilla por su ausencia y un derecho adquirido como son las vacaciones estivales los conductores y conductoras sólo las pueden disfrutar cada tres años, mientras que el resto de personal de la empresa pública, cada dos. Y hay más; si en Sadeco la plantilla tiene hasta seis días de asuntos propios, en Aucorsa únicamente tienen uno y "este punto ni siquiera aparece en las reivindicaciones para los paros parciales, pero ahí está", indica Pedrajas.

Precisamente, Podemos Córdoba ha destacado lo lamentable que resulta que los trabajadores y trabajadoras se hayan visto abocados a una última y no deseada medida, que ha sido la huelga parcial del 3 al 6 de enero, para reivindicar sus derechos laborales. "Huelga en la que los servicios mínimos, que deben ser del 25%, ha sido la empresa la que ha decidido con su propio criterio cuáles serán y quiénes los hacen, publicándolo ayer, lunes, al mediodía, primer día de los paros parciales, sin que la plantilla supiese a quienes afectaba, y, de nuevo, sin contar para nada con el comité de empresa", ha expuesto la edil de la formación morada.

"Desde Podemos Córdoba apoyamos, como siempre, la calidad en el empleo, la dignidad de los trabajadores y trabajadoras, minimizar al máximo los riesgos laborales, la negociación colectiva y proteger y apoyar los servicios públicos, que son un derecho de todos los ciudadanos y ciudadanas, en definitiva", ha recordado Pedrajas, para añadir que "una empresa pública, por definición, no puede estar regateando medios y recursos a costa de exprimir a su plantilla, porque su objetivo no es sacar beneficios, sino prestar un servicio público a la ciudad".