El colectivo Plataforma por Córdoba ha solicitado por escrito a la concejal de Infraestructuras y Medio Ambiente, Amparo Pernichi (IU), varias actuaciones en zonas verdes de la ciudad, tanto de la Zona Centro como del Distrito Sureste. Así, han planteado la plantación de abundante arboleda en la extensa y soleada pradera de césped junto a la Ermita de los Mártires en el Balcón del Guadalquivir.
En este punto, encima concreto, se ha sugerido especies de ribera, dado que dicho suelo drena de forma muy lenta, a fin de que arraiguen y se desarrollen convenientemente. "Hacen falta muchos más árboles en toda esa zona hasta llegar al recinto ferial de El Arenal, que completen las hileras de los ya existentes, diversificando las especies y creando un pulmón verde y sombreado como ocurre en los jardines" de la Avenida de El Flamenco (antigua Conde de Vallellano), "para eliminar esos eriales soleado tan impropios para nuestra climatología".
Por otro lado, reclaman la reposición de almezos en los paseos bajos del Balcón del Guadalquivir y de las gomas de riego en lo que fue madreselva que debería cubrir el talud pedregoso junto al Molino de Martos y que ahora está completamente seco. En este punto, el colectivo señala que también falta reponer la celosía de alambre y reponer buganvillas en los entrantes con bancos de las zonas más bajas.
Por esa misma zona, Plataforma por Córdoba apunta a una plantación de arboleda de potencial gran porte para que permita obtener amplias sombras en la mediana de tierra en los viarios que lindan con la fachada oeste del Centro Comercial El Arcángel. "Hemos propuesto tipuanas por el gran desarrollo que alcanzan, en un espacio que es abrasador en primavera y verano", señalan en su comunicado público.
Finalmente, y con copia al gerente y personal directivo del Instituto Municipal de Gestión Medio Ambiental Jardín Botánico de Córdoba (Imgema), se ha solicitado la aplicación de herbicida sistémico al eucalipto que está creciendo en uno de los pretiles del Molino de Martos, de manera que antes de cortarlo se mate hasta su raíz, para que deje de producir daños en este monumento declarado Bien de Interés Cultural (BIC), ya que se trata de un árbol de crecimiento rápido y muy expansivo.
