La concejal de Infraestructuras, Amparo Pernichi (IU), ha dejado esta mañana marcados los puntos sobre las íes respecto de la gestión realizada sobre el plan urbanístico ’50 Obras 50 Barrios’, que viene heredado del anterior gobierno local del PP, después de que el líder provincial popular, José Antonio Nieto, acusara ayer al cogobierno de PSOE-IU de realizar “trampas” al incluir en el convenio ministerial obras que estaban ya ejecutadas en sustitución de actuaciones aún por hacer.
Por lo pronto, ha dejado claro que para el próximo lunes, prácticamente todos los 27 certificados de obra del citado plan van a estar terminados, y eso supondrá que el mismo día 30 se van a poder remitir al Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas. Con lo cual, no hay apenas riesgo de que las arcas municipales tengan que asumir el coste de las actuaciones que no cumplan el plazo. Y las que pueden quedar fueras, como es el caso de la Plaza Padres de Gracia (la única que citó con posibilidad de no estar para el lunes) su coste “se quedaría como si fuera obra de financiación municipal”.
La responsable de Infraestructuras ha incidido en la idea de que el ’50 Obras 50 Barrios’ es un plan que ya funcionaba cuando entraron a gobernar, porque “venía con un mal planteamiento de inicio”. Eso significa que se firmó tarde, en mayo, y además se modificó el procedimiento de licitación para las obras de negociado a abierto, “y eso implica ya un retraso sobre el retraso inicial de, como mínimo, dos meses”. A efectos prácticos, obras que se podrían haber iniciado en junio pasado, comenzaron a ejecutarse realmente a partir de septiembre, con lo que “hasta principios de octubre no se podría tirar del dinero de las bajas en las licitaciones de las 27 obras programadas como prioritarias”.
Medio millón de euros
Esas cantidad, 500.000 euros, fue destinada por el PP en el gobierno anterior “de forma incomprensible a obras que no son menores y que se encuentran por encima de un contrato de dos meses”, ha abundado Pernichi. Y con esta situación límite se encontró el nuevo ejecutivo local.
“Por ese motivo se solicitó al Ministerio una modificación en el convenio para este plan de 2,5 millones de euros”, en el sentido de sacar las ocho obras de reserva propuestas por el PP, que tenían un coste final de 850.000 euros, para incluir actuaciones de financiación municipal, nueve, con un valor global de 1.175.460 euros. “La idea es ahorrar dinero al Ayuntamiento y es, además, una práctica muy habitual que se ha estado haciendo en este Ayuntamiento en los años anteriores” con el gobierno del PP, y, de hecho, tanto con los populares como con el cogobierno actual el Ministerio aceptó.
En concreto, se han incluido el Plan Asfalto, las obras del Coluze en María Auxiliadora, San Pablo, Realejo y Alfaros, la remodelación de la calle Lebrija, los alumbrados del Cordel de Écija, el aparcamiento de San Rafael de la Albaida y de la calle Arquitecto Juan Ochoa. Las obras sustituidas fueron a los accesos al antiguo Hospital Militar, el acerado de la avenida Cervantes, la segunda fase del acerado de la carretera de las Ermitas, la zona verde y los aparcamientos junto a la glorieta de Ibn Zaydun, la sombra para el espacio escénico del Zoco, la ampliación de la calzada en las calles Músico Infantas y Vicente Ríos, las actuaciones de mejora medioambiental en zonas verdes o rematar el plan Coluze en los barrios.
En cualquier caso, las actuaciones “de corte mayor” que han sido sustituidas, se incluirán en el próximo programa de mejora viaria para 2016, junto a la decena de actuaciones pactadas en los últimos meses con los diferentes consejos de distrito y que aluden a pequeñas actuaciones en mobiliario o zonas verdes.
En definitiva, Pernichi ha lanzado un mensaje de tranquilidad, ya que el Ayuntamiento, a pesar de haber tenido los tiempos realmente ajustados ha logrado salvar la situación con un coste menor o cero. El lunes se verá.
