SUCESOS

Los padres del desaparecido Paco Molina piden colaboración mediante un apartado de correos

El joven tenía 16 años cuando desapareció en 2015
Los pafres de Paco Molina en la concentración de hoy
photo_camera Los pafres de Paco Molina en una concentración. IMAGEN DE ARCHIVO.

Los padres de Paco Molina, que tenía 16 años cuando desapareció en julio de 2015 en Córdoba capital, han puesto en marcha hace unos días el apartado de correos 3011 de Córdoba "por si hay alguien que tenga información, la haga llegar, aunque sea de forma anónima", con el fin de hallar pistas sobre el paradero del joven, que cumple años el día 24 de octubre y las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado mantienen abierta la investigación.

Según informa a Europa Press el progenitor, Isidro Molina, "la Policía sigue con su investigación, pese a que ha pasado mucho tiempo", de manera que los padres mantienen "la esperanza de encontrarlo", de ahí que confíen también en el correo postal por "si alguien recuerda algún hecho o comentario".

También, comenta que están pendientes de posibles actuaciones en hospitales, a través del Centro Nacional de Desaparecidos (Cndes), por si Paco o cualquier otra persona desaparecida ha sido atendido durante la crisis sanitaria por la pandemia del coronavirus, incluso con la posibilidad de analizar "a nivel europeo", señala.

El padre de Paco Molina indicaba recientemente que en estos cinco años ha comprobado que "la gente que ha sufrido algo, algún problema, empatiza mucho más con esta situación, con las familias que tienen un ser desaparecido". Así, espera que "esta desgracia que vive todo el mundo, con la pandemia, haga más empáticas a las personas con este problema".

Mientras, su madre, Rosa Sánchez, remarcó que su hijo "no se fue, se lo han llevado, aunque no sé dónde, pero él no se fue". Al respecto, desde la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta de la Policía Nacional apuntaron el año pasado a la investigación sobre "personas que rodeaban a Paco, bastante más mayores que él", que podrían "tener algún dato que a lo mejor no han querido dar por miedo o porque les implica directamente en algún hecho que no es del todo lícito".

El caso

Francisco Molina Sánchez se encuentra en paradero desconocido desde el 2 de julio del año 2015, cuando quedó con unos amigos en la capital cordobesa.

Desde el principio del caso, su padre ha puesto en duda que su hijo se marchara voluntariamente, dado que "no se llevó el dinero que tenía en casa, ni tampoco ropa", por lo que no entiende cómo, según testigos, el menor tomó un autobús hacia Madrid, donde se le perdió la pista.

Durante este tiempo han recibido muchas llamadas aportando falsas pistas, algunas de las cuales han sido investigadas por la Policía. Una de ellas "era de Colombia y nos pedían dinero, diciendo que si no matarían a mi hijo", según relató el padre, quien agregó que la Policía descubrió de dónde venía y que era una pista falsa.

Asimismo, un hombre con antecedentes acusado de un delito contra la integridad moral, después de que supuestamente ofreciera a los padres de Francisco Molina pistas falsas sobre su paradero, aceptó en sede judicial en noviembre de 2017 una pena de seis meses de prisión y multa de unos 700 euros, tras reconocer los hechos y pedir "disculpas" por lo que hizo. El caso está abierto, tanto judicial, como policialmente.

Además, el correo electrónico '[email protected]' se mantiene abierto por la familia para que ciudadanos que se realizaran fotos en torno a los días de la desaparición de Paco en el centro de la capital cordobesa o en la Estación de Autobús de Córdoba, donde se le vio coger un autobús, o en Madrid, hacia donde se dirigía dicho vehículo, las envíen al correo, al tiempo que ven "interesantes" fotos del área de servicio de Pedro Abad (Córdoba), por ser lugar de parada del autobús.

Al hilo de ello, Isidro Molina comentó hace unos meses que les habían llegado varias fotos, pero ninguna útil para la investigación. También aclaró que las fotos son "totalmente confidenciales y no se van a publicar", pero que "a lo mejor" pueden dar pistas para la investigación, recordando lo ocurrido a tal efecto en el caso de la menor Madeleine McCann.

También, explicó que "la Policía ha buscado a Paco en diez países, entre ellos Irak y Siria, pero también en Italia", entre otros. Los padres del joven están viviendo esta búsqueda "incesante con la esperanza de volver a verlo algún día".

Seminario

Entretanto, Isidro Molina resalta la labor con el seminario 'Haciendo frente a las desapariciones de menores', un programa de prevención e información de la Asociación de Familias y Amigos de Personas Desparecidas de Córdoba (Afadecor), creada por los padres de Paco Molina, el joven desaparecido en la capital cordobesa en verano de 2015, junto a la Fundación Europea por las personas desaparecidas 'QSDglobal', y apoyado por la Diputación Provincial, con el fin de "hacer frente a un fenómeno que provoca situaciones indeseadas para todos".

Al respecto, hace unos días estuvieron en la localidad cordobesa de Montilla y en esta próxima semana, concretamente el miércoles, se acercan a la Casa de la Cultura de Baena. También, apunta que se pone en conocimiento de los centros educativos, "porque la docencia juega un papel importante, sobre todo en la adolescencia".

Las sedes en las que se celebrarán las sesiones informativas serán ocho para alcanzar a todas las comarcas de la provincia: Montilla, Villafranca de Córdoba, Baena, Palma del Río, Villanueva de Córdoba, Córdoba capital, Lucena y Peñarroya-Pueblonuevo.

La propuesta se desarrolla presencialmente con limitación de asistentes, por las circunstancias del covid-19, y en formato 'online' hasta completar un total de cien inscritos. En dicho seminario participan expertos en desapariciones, familias que han vivido situaciones reales, entidades especializadas y fuerzas y cuerpos de seguridad de Estado.

Mientras, precisan que actualmente existen 150 denuncias activas en Córdoba --132 de menores cuando desaparecieron--. De ellas, 63 son del ámbito de la Policía Nacional y 87, de la Guardia Civil.