La coordinadora provincial de Pacma en la provincia de Córdoba, Patricia García, ha alzado la voz para denunciar la "alarmante situación" que podría estar teniendo lugar en las instalaciones de la perrera de Córdoba, gestionada por la empresa pública Sadeco. Según un comunicado de esta organización, los hechos se producen después de la llamativa involución de un felino de dos meses que apareció totalmente demacrado tras pasar 15 días en las instalaciones municipales. Había sido abandonado en una colonia felina.
El gato, inicialmente ingresado en perfecto estado con apenas ocho semanas, muestra una transformación preocupante en las fotos comparativas que han sido compartidas por la formación política animalista, donde se aprecia una importante pérdida de peso, posible deshidratación y un visible estado de apatía.
El animal, que ha sido bautizado como 'Krispy', ya ha sido rescatado y se encuentra en proceso de recuperación. Sin embargo, la atención se centra ahora en el estado general de los animales dentro de la perrera de Córdoba que, según García, "no sólo se enfrentan a los abandonos y el confinamiento repentino, sino que en ocasiones no ven cubiertas sus necesidades veterinarias o no reciben la suficiente atención y tratamiento adecuado según su caso".
Para el Partido Animalista, el de 'Krispy' es sólo un caso más que "demuestra" la necesidad urgente de abordar la situación con la perrera de Córdoba y las condiciones en las que viven los animales albergados en ella.
Asegura García que pedirá explicaciones a Sadeco y trabajará para que la empresa realice seguimientos adecuados a cada animal con el fin de evitar situaciones como la del pequeño felino.
