Finalmente las ordenanzas fiscales de 2024 para la ciudad de Córdoba, que van a suponer, en palabras de la edil de Hacienda, Blanca Torrent (PP), una reducción en la recaudación de 806.000 euros, han salido adelante esta mañana en un Pleno extraordinario celebrado para la ocasión, y lo han hecho gracias a la mayoría que tiene el PP, porque la oposición al completo -PSOE, Hacemos Córdoba y Vox- se han posicionado en contra.
La portavoz de Vox, Paula Badanelli, ha echado en cara al PP que si han bajado "algo" los impuestos ha sido gracias a un acuerdo firmado con su partido en 2019, cuando los populares no tenían la mayoría y necesitaban del apoyo de la ultraderecha, que "ustedes han incumplido con creces". Para la portavoz, lo previsto para 2024 no es una bajada, sino una congelación, que "con la inflación, supone una subida encubierta". Y no sólo eso, sino que además ha criticado lo que por otra parte van a ser subidas de hasta el 35% en Sadeco "para un servicio que no mejora" y debido a "una locura recaudatoria" de los populares "para pagar sus fiestas y viajes".
Un ejemplo de ello es que "con lo que se paga a los asesores" se podría haber bajado un 50% el IBI de rústica, siempre según Badanelli.
Por parte de Hacemos Córdoba, Irene Ruiz ha indicado que su grupo "mira con recelo" la propuesta de unas ordenanzas "vacuas e imprecisas", porque "no supone un cambio significativo para el bolsillo de los ciudadanos, especialmente de quienes están en mayores dificultades". Según la edil de izquierdas, se supone que los que se recauda de los impuestos sirve luego para gestionar y cubrir inversiones municipales, "pero, por mucho que ustedes nos digan que eso no afecta a los servicios públicos, una bajada continuada como la que llevan a aplicando los terminan deteriorando".
Ruiz ha indicado también que no se puede considerar un logro todo lo que no sea "una subida gradual, proporcional, progresiva y sostenida en el tiempo" de las ordenanzas, porque todo lo demás acaba proyectando "una sombra de privatización" sobre los servicios y las empresas municipales.
Y mientras que la bajada de las ordenanzas no afecta a la mayoría de los bolsillos de los y las contribuyentes, la subida de Sadeco, para la recogida de basura, y la que se espera de Emacsa, para el agua, "si suponen un duro golpe", hasta el puto de que "muchas personas ni siquiera tienen para pagarlo".
Desde el PSOE, su portavoz, Antonio Hurtado, ha expuesto que es "imposible" apoyar estas ordenanzas porque incumplen tres principios básicos como son la "suficiencia financiera", la "progresividad marcada por el artículo 31 de la Constitución" y "si son lo que realmente necesita la ciudad". En los res supuestos "la respuesta es no", ha dicho.
Sobre el primer supuesto Hurtado ha indicado que el proyecto de ordenanzas no mejora la suficiencia financiera municipal, porque "ya tenemos limitaciones y necesidades sin cubrir por falta de recursos" y una bajada de 806.000 euros en la recaudación, como indica Intervención en su informe, "tendrá efectos sobre la regla de gasto y el Ayuntamiento no podrá gastar en 2024 más allá de una cantidad".
Hurtado ha dicho que no son ordenanzas progresivas según la capacidad de renta, porque, por un lado, se le baja el Impuesto de Actividades Económicas a empresas "con unas cuentas de explotación superiores al millón de euros" para dejar e recaudar 200.000 euros, pero, por otro lado, se les sube un 8,5% la ayuda a domicilio a 5.600 familias con graves problemas para llegar a final de mes, para recaudar precisamente esos "200.000 euros que se lo han ahorrado a sus amigos los empresarios", y so, en palabras de Hurtado, es "injusticia social".
En cuanto al tercer supuesto, el portavoz socialista ha echado en cara a la concejala de Hacienda que no hayan sabido aprovechar las bonificaciones que existen en materia de novedosos criterios medioambientales para hacer frente a "la situación de alarma de cambio climático en la que nos encontramos", tales como la posibilidad de contar con puntos de recarga para incentivar el uso de vehículos eléctricos, menos contaminantes que los de combustibles fósiles.
Precisamente, el PSOE ha presentado una enmienda a la totalidad de las ordenanzas fiscales, que fue rechazada con los votos en contra de PP (15 ediles) y Vox (tres concejales) y a favor de Hacemos Córdoba (cuatro) y los socialistas (siete), al igual que ha ocurrido con otras tres enmiendas parciales con la misma votación.
Finalmente, el proyecto de ordenanzas se aprobó con el único voto a favor del PP, además de una enmienda popular para incluir bonificaciones al IBI de urbana, que sólo tuvo el voto contrario de Hacemos Córdoba.
