Aunque la situación de la Covid-19 en el interior de la Prisión de Córdoba va remitiendo, con sólo un interno positivo y los módulos ya libres de la cuarentena, si bien desde enero hasta ahora ha habido 74 personas en cuarentena y ocho positivos entre los trabajadores, el problema se ha trasladado a la acumulación de presos en determinados módulos por obras en plena pandemia.
Así, la organización Tu Abandono Me Puede Matar ha señalado que los internos de ambos módulos "no se han trasladado a otros centros, sino que se han distribuido en el resto de departamentos", con lo que ahora "se encuentran hacinados 142 internos por módulo, a razón de dos por celda.
Todo ello implica grandes colas en las cabinas de teléfono, colas en la compra del economato, turnos para entrar al comedor, en resumen, "fricciones, tensiones y broncas entre ellos y eso que aún no ha llegado el calor", advierten desde el colectivo de funcionarios.
De hecho, desde la asociación se planteó el pasado 22 de enero una queja a la Dirección del centro , "a la que hemos obtenido el silencio por respuesta". El caso es que a día de hoy se han paralizado las obras durante un mes, según la Dirección, y los dos módulos siguen cerrados mientras el resto "están a reventar".
En ese escrito Tu Abandono Me Puede Matar hace partícipe a la Dirección "del malestar generalizado por parte de la plantilla, como consecuencia de la gestión que se ha llevado a cabo respecto a las obras de los Módulos 3 y 4".
Por lo pronto, indica que se ha realizado el desalojo de los citados módulos sin avisar previamente a los funcionarios de los departamentos afectados, con el fin de poder organizar todo lo que conlleva una distribución tan numerosa de internos. y tampoco se advirtió a los departamentos de destino, con el fin de para preparar celdas, mirar incompatibilidades, gestionar órdenes de salida de los destinos, coordinar con el departamento de cocina para los menús de cada uno, avisar a enfermería para repartos de medicación, preparar los materiales y enseres necesarios en cuanto a colchones, mantas, elementos y productos de limpieza y demás mínimos indispensable para acomodar a tantos internos y hacerlo con el tiempo adecuado para dar lugar a una organización correcta y con garantías de seguridad.
"Ante esta falta de previsión, y teniendo en cuenta que estamos en plena tercera ola de la pandemia por Covid-19, se ha realizado la circulación de un gran número de internos a los departamentos de destino, sin hacer ningún tipo de pruebas", afirman desde el colectivo. Y esto ha dado lugar a módulos masificados, sin apenas celdas libres, lo cual "traerá problemas de convivencia y fricciones entre ellos".
Se pone de relieve en la nota la falta de previsión cuando en módulos como el 11(el del Programa de Atención Integral a Enfermos Mentales, Paiem), se mezclan internos de régimen ordinario normal, con internos cuyas patologías psiquiátricas deben ser sometidos a medicación especial, lo que deriva en una auténtica bomba de relojería.
En el módulo 2 (el Terapéutico) se ha desalojado la segunda galería y se ha dejado la misma para todos los internos que regresan de permiso, a sabiendas que la principal entrada de droga de forma clandestina es a través de éstos, con el peligro que eso conlleva en internos que intentan rehabilitarse de adicciones como la droga.
Debido a la atención y exceso de trabajo de los internos del módulo 2, hacia las labores de limpieza extra, reparto del racionado, duplicidad en celda o reparto de economato, "como consecuencia del ingreso de los permisos, están descuidando su propia terapia de rehabilitación", advierte el escrito.
"Los trabajadores en general nos preguntamos que si la realización de las obras se conoce desde hace mucho tiempo, ¿por qué no se han realizado conducciones a centros como Archidona que permanecen tan sólo con cuatro módulos operativos?", abunda en la nota. Ahora las conducciones están suspendidas, pero por motivos extraordinarios se pueden efectuar y la realización de estas obras es uno de ellos. Por otra parte, esas conducciones se podían haber planificado con antelación suficiente, antes de su suspensión, para evitar la masificación del resto de módulos que ya de por sí están congestionados.
Por último, "desde esta asociación ponemos en relieve la actuación y sobreesfuerzo de los funcionarios y jefes de servicios afectados esos días por la gran carga de trabajo extra que tuvieron que soportar, para organizar tanto el desalojo y traslado, como la recepción en los distintos departamentos y que con gran profesionalidad, tal y como caracteriza a la plantilla a la que Vd. dirige supieron solventar con gran esfuerzo y sin apenas tiempo".
También "realzamos el mérito de los funcionarios que tendrán que sostener el hacinamiento de los módulos 1, 2, 6, 8, 11 y 12 y resolver con destreza los múltiples problemas que surgen en el día a día, para que no deriven en contratiempos mayores y difíciles de solventar.
