Los bomberos han tenido que trabajar en una de las tónicas habituales de la ciudad, los contenedores ardiendo, de los que hay una media de entre tres y cuatro cada semana. Esta vez el contenedor a apagar se encontraba en pleno casco histórico.
Según informan fuentes de los bomberos el suceso ha tenido lugar esta tarde del domingo en la calle Barroso a la altura del número 10, muy cerca por tanto de los apartamentos Casa del Aceite.
No hay que lamentar ningún daño añadido, ni personal ni de mobiliario urbano o vehículo.