Las restricciones anunciadas ayer por el presidente de la Junta de Andalucía, Juan Manuel Moreno, han vuelto a llevar el cierre de los comercios a las 18:00. A esto hay que añadir el cierre perimetral de la provincia y también el cierre de los 21 pueblos que superan los 500 casos por cada 100.000 habitantes. Todo esto coincide con el periodo de rebajas, un respiro que, aunque mínimo por la situación actual, esperaban los comerciantes cordobeses. Con las nuevas medidas, que además a la Junta le gustaría endurecer si se lo permitiese el Gobierno. De esta manera, el tradicional periodo de descuentos va a quedar gravemente dañado.
Y es tal ese daño previsto que el presidente del Centro Córdoba, Manuel Blasco, considera que las rebajas no existen, pues esto remata una situación de la que Blasco lleva advirtiendo mucho tiempo y que parte de la llamada Ley de Rebajas, a la que este responsable comercial se lleva oponiendo años. "Menos mal que los cierres perimetrales no han afectado a toda la provincia, porque si no sería mejor cerrar directamente".
Para Blasco "el comercio no ha dado problemas de contagios en ningún sitio de España", por lo que no entiende semejantes restricciones cuando además "los aforos son pequeños y la gente espera fuera".
En el Centro Comercial Abierto Valdeolleros/Santa Rosa entregaban la pasada semana con notable alegría el Gran Escaparate de Navidad, como colofón a sus acciones preventivas. Su presidenta María José Ruiz coincide con Blasco al afirmar que estas rebajas son inexistentes y que esa comentada prevención estuvo destinada a hacer los descuentos ya en Navidad suponiendo que tras las fiestas podían endurecerse las restricciones como así ha sucedido. Ruiz ha adelantado a CÓRDOBA HOY que están en vías de organizar una protesta la semana que viene en el barrio, pues la situación está llegando a un límite inasumible para los pequeños comerciantes.
La responsable de esta zona comercial lamenta además que las inversiones en vaporizadores, desinfección por ozono, mamparas etc. que están realizando en los comercios no sirvan para nada, sobre todo al comparar la situación en los barrios con respecto a los grandes centros comerciales, donde señala que se han producido importantes aglomeraciones. "Queremos hacerle ver a la Junta que el pequeño comercio se ha adaptado a todas las normativas".
Por su parte Ramón Luque, de la Asociación de Comerciantes de Occidente y Ciudad Jardín ADECOC, ha indicado que las rebajas ya estaban yendo literalmente fatal. "Las rebajas ya empezaron muy mal y esto sencillamente las va a empeorar".
"Nos sentimos mal por estas medidas, puesto que en el pequeño comercio creo que estamos siendo ejemplares con las medidas de seguridad e higiene". Para Luque las medidas se están prolongando en exceso pese a las inversiones en mamparas o geles, aunque ha detallado que no es quién para juzgarlas.
La Viñuela es el único Centro Comercial Abierto en el que a juicio de sus responsables las rebajas al menos iban medio funcionando, por decirlo coloquialmente. Y así, su presidente, Manuel Calvo, ha detallado que las ventas se situaban en torno a un 50%: "las rebajas iban...lentamente". Sin embargo como es lógico las nuevas restricciones harán más que mella en esa marcha junto a los cierres perimetrales de muchos pueblos, algo que como en el caso del centro ve especialmente perjudicial.
Para Calvo las medidas "se siguen cebando con el pequeño comercio y el tradicional, que es el que menos culpa tiene y en el que más medidas tenemos de aforos e higiénicas". Para el responsable comercial de la Viñuela, y ante las malas previsiones también para la campaña de primavera-verano, este casi puede considerarse otro año en blanco a este paso, por lo que considera vital que se pongan en marcha ayudas directas serias.
Por su parte, Rafael Bados, presidente de la Federación Provincial de Comercio, hace suyas las manifestaciones emitidas en una nota de prensa por parte de Comercio Andalucía. Esta entidad ha afirmado que en otras comunidades autónomas se ha diferenciado entre pequeñas y grandes superficies a la hora de fijar las restricciones horarias por la pandemia, lo cual se podría haber replicado en la comunidad andaluza. Los comerciantes andaluces señalan que, en otros periodos de aplicación de restricciones tan duras, las ventas del comercio de cercanía han caído hasta un 80% en algunas zonas con respecto al mismo periodo del año anterior, por lo que volver a imponer el cierre a las 18:00 horas va a acelerar la crisis del sector y el cierre definitivo de muchos establecimientos.
Comercio Andalucía ha vuelto a poner en evidencia la importancia que el pequeño comercio tiene para la economía andaluza, donde uno de cada cuatro andaluces trabajan en el sector, que representa un 23% del empleo y un 11.5% del PIB andaluz.
