Acaban de nacer las primeras 30 crías de de gallina Andaluza Antigua Moñuda y Antigua Tufona en los corrales de Arrgamyt, la asociación dedicada a su recuperación con sede en Guadalcázar, un santuario para estas especies en peligro de extinción que apenas tienen representación fuera de este lugar. Se trata de los primeros pollitos de una serie de puestas que concluirán en torno al verano con el nacimiento de unos 300 ejemplares.
No es una puesta habitual solamente, sino que se sitúa en un intento de la asociación por salir de su atolladero económico. El pasado verano su responsable, Francisco Alcaide, puso en marcha un proyecto de apadrinamientos que de momento está resultando insuficiente.
En su momento hubo un acercamiento con el Centro Agropecuario de la Diputación de Córdoba. Alcaide lo descartó por varios motivos. En primer lugar el centro, en el borrador del proyecto, y como narra este criador, disponía que los animales tendrían que pasar a ser propiedad de la entidad provincial, quedando Arrgamyt para el mantenimiento. Además las pruebas y análisis requerirían del traslado de ejemplares a la sede del Centro Agropecuario, algo con lo que Alcaide tampoco estaba conforme, junto a tener una representación en las instalaciones del mencionado centro, "por lo que la asociación no serviría ya para nada". Se añadía otro motivo: la desconfianza por las dificultades de la Diputación es sacar adelante allí a otro ejemplar de gallina, la andaluza sureña.
Recientemente, continúa Alcaide, un fondo de inversión se había interesado en la comercialización de las carnes de estas gallinas, lo que supondría la creación de una factoría que en unos cinco años generaría alrededor de 80 puestos de trabajo en Guadalcázar. Este proyecto está ahora mismo estancado.
La cría
Las gallinas reproductoras están apartadas en jaulas, "con una alimentación que ya quisiera para mí", bromea Alcaide, al margen del estrés y con ausencia de químicos.
Las bandejas de nacimiento se separan por sectores. Hay cuatro sectores. Como decimos las reproductoras están apartadas. Cada una en una jaula de un metro por un metro. Un macho cubre a unas tres o cuatro gallinas de la misma raza. Los huevos se numeras, se vinculan a una madre con una determinada gallina que a la vez está siendo cubierta por un gallo con otra determinada anilla. Cuando nacen los pollitos se les coloca una brida en una pata. La mantendrán hasta adultos. Entonces se vuelve a hacer de nuevo una selección según las mejores características de los animales más destacados entre todos.
La antigua moñuda es un ave ancha, baja y fuerte, muy rústica. Las hay con moño grande y con moño pequeño. Las del grande tienen el cráneo en forma de cono. La antigua tufona o gallina barbuda se llama así porque nace con su barba, dividida en patilla y barba, las patillas están orientadas hacia atrás y la barba es un florón hacia abajo; es una gallina erguida, alta, esbelta y agresiva. Ambas razas son las de mayor tamaño de Andalucía y apenas contaban con ejemplares hasta que empezó el trabajo de la asociación en el año 2007.
Para saber más sobre el origen de la asociación y la cría de estas gallinas pinche aquí.
