El pudor le ha impedido esta mañana al ministro de Agricultura en funciones, Luis Planas (PSOE), reconocer que muy probablemente ocupará de nuevo ese puesto, entre otras cuestiones porque es una materia "que me gusta sobremanera", pero basta recordar las claras palabras de su líder, Pedro Sánchez, no hace mucho tiempo en su segunda visita de este año a la capital cordobesa: "Espero regresar a Córdoba como presidente y con Luis Planas como ministro".
En fin, que Planas ha eludido responder a una pregunta obvia entre los cordobeses y cordobesas: ¿Habrá renuevo representación cordobesa en el Gobierno? Recordar que, además de él, está Carmen Calvo aún como vicepresidenta en funciones, si bien ya se ha avanzado en el preacuerdo de ayer de PSOE y Unidas Podemos que ese puesto le va a corresponder a Pablo Iglesias...
El caso es que esta mañana el secretario provincial del PSOE en Córdoba, Antonio Ruiz, y el propio Planas realizaron una valoración algo más a fondo de los resultados electorales del pasado domingo, con el añadido del anuncio ayer de un preacuerdo de Gobierno que afianza los resultados en las urnas.
"Somos la primera fuerza en Córdoba y la que ha recibido una confianza mayor de los cordobeses y cordobesas, con una diferencias de 46.000 votos que debido a la Ley D'Hondt nos permite sólo llegar a dos diputados, aunque hubiera dado para más", ha indicado Ruiz, para añadir que "es la quinta vez que eso ocurre en elecciones". De igual modo, el portavoz de los socialistas cordobeses ha recordado que en el Senado se envían a tres de este partido por ninguno del PP. Y es que en 72 de los 77 municipios de la provincia, incluyendo la capital, ha sido la fuerza más votada, lo que supone el 93,5 por ciento, la fuerza mayoritaria, incluyendo la capital.
Frente a eso, el PP "es tercera fuerza en 26 municipios", por lo que "ya está bien que nos traten de forma despectiva y dejen de decir que han empatado con nosotros porque eso es tomar el pelo a los cordobeses y cordobesas". También ha criticado Ruiz las voces que señalan que el PSOE ha dado alas a la ultraderecha, cuando los "culpables de eso son los que los han blanqueado aceptando su apoyo para conseguir sillones a cualquier precio".
Posteriormente, Planas ha agradecido el apoyo recibido desde Córdoba, que "contribuirá a la mayoría que se conformará en España", porque "hemos ganado con claridad estas elecciones, pero no hay motivo para la frustración y sí para la reflexión y preocupación por el aumento de la extrema derecha, algo en lo que tendrá que reflexionar, y mucho, la derecha, que es la que les ha imprimo las tarjetas de visita y la carta de presentación en Madrid y en Andalucía".
El resultado, en palabras del ministro en funciones, demuestra que el electorado quería "un Gobierno, lo quería pronto, que fuera eficaz y que resuelva los problemas de España y eso va a ocurrir en los próximos cuatro años, con un Ejecutivo progresista y estable y con la mirada puesta en el futuro". No obstante, a este proyecto "ilusionante" habrá que sumarle otras fuerzas para conseguir el apoyo necesario de cara a la investidura. Para ello hay de plazo hasta el próximo 3 de diciembre, cuando se constituirán el Congreso y el Senado, y no ha descartado el acercamiento a Ciudadanos para conseguir de esa formación malherida su apoyo a Pedro Sánchez, de la forma que sea. "Necesitamos a todos aquellos llamados a colaborar para formar Gobierno, con patriotismo democrático y con fe en la Constitución", ha dicho.
También ha tenido palabras para el PP, "que ha obtenido el segundo peor resultado de su historia", pero que critica desde el minuto uno cualquier planteamiento que pueda sacar al país del desbloqueo, cuyo "camino ya hemos iniciado".
Tres son los pilares en los que se va a basar el nuevo Gobierno: Un claro carácter social, para recuperar los servicios públicos y las prestaciones sociales que se han visto mermados por una crisis "de la que se ha salido de la forma más desigual de toda la UE, a la que tenemos que volver a equipararnos". Siempre, eso sí, "respetando los compromisos europeos sobre el déficit, la deuda publica y en materia fiscal para integrarnos en ese club avanzado de la zona euro".
En segundo lugar, un "respeto íntegro a la ley y a la Constitución", que llevará al diálogo y la negociación, pero respetando el texto constitucional "hasta el último extremo", y, finalmente, una cohesión y una lealtad capaces para responder a los retos del país y del mundo, y en este sentido, Planas ha puesto el ejemplo de la próxima Cumbre del Clima de 2019, que se celebrará en Madrid, del 2 al 13 de diciembre, pero bajo la presidencia de Chile, que no ha podido organizarla en su país.
