JUZGADO DE LOS SOCIAL

El juez obliga a la Prisión a readmitir a un preso que fue despedido de forma ilegal

Según la Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía (APDHA), ya son seis los casos de reclusos trajadores en Córdoba que han sido estimadas sus demandas

2016012513500225814[1]
photo_camera Prisión de Córdoba FOTO: AULA DE LA NATURALEZA

La Prisión de Córdoba ha tenido que readmitir a un preso que fue despedido en cumplimiento a la petición del afectado para que se ejecutara la sentencia del Juzgado de lo Social en este sentido que estimó el cese como ilegal, según ha informado esta mañana a través de un comunicado la delegación de Córdoba de la Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía (APDHA).

Según la misma nota, este colectivo ha acompañado en los últimos años a presos que trabajando en prisión se les ha cesado de forma irregular. Así, "al menos a seis presos cordobeses se les han estimado sus demandas en los Juzgados de lo Social al no haber sido despedidos en legal forma, y la última sentencia, que ha sido ejecutada provisionalmente, está pendiente de recurso de suplicación ante el Tribunal Superior de Justicia de Sevilla", añade APDHA.

Según el último dato oficial, correspondiente al anuario 2014 del Ministerio del Interior, el Centro de Córdoba es el más poblado de Andalucía con 1.537 presos y a dúa de hoy estas cifras se mantienen estables. Los presos trabajadores lo hacen tanto prestando los servicios y necesidades de la propia prisión como a empresas externas. En Córdoba entre 250 y 300 presos trabajan en prisión, de los que cien lo hacen en actividades auxiliares como limpieza, lavandería, jardinería, reparto o comedor. Otras actividades que congregan un número similar de presos trabajadores son cocina, panadería, economatos y mantenimiento. Igualmente, se dispone de talleres como confección industrial.

Campaña contra el 'trabajo esclavo'

En palabras de APDHA, el trabajo de los presos hace que la Administración ahorre dinero, ya que en 2013 se informó de que “en la encomienda de alimentación se invierten 3,50 euros por interno y día en las prisiones dependientes del Ministerio del Interior, mientras que en la Comunidad de Cataluña asciende a 11 euros y la media de un catering se sitúa en 8 euros".

APDHA mantiene abierta en la actualidad una campaña sobre lo que se considera "trabajo esclavo" reclamando la equiparación de los derechos laborales de las personas presas con los trabajadores libre y para ello elaboró un libro titulado Guía Práctica sobre los Derechos Laborales de las Personas Presas, que contó con el aval y financiación del Consejo General de la Abogacía Española y de la Fundación Agape del que se han editado 5.500 ejemplares para los  presos.

El salario de los más de 12.000 trabajadores que existen dentro de prisión en España (el 40% de los que pueden trabajar) rara vez supera el 30% del SMI, llegando a cobrar menos de un euro por hora. Además, se da la circunstancia con frecuencia de que una misma actividad, en algunos casos es retribuida y en otros no. La realización de horas extraordinarias no remuneradas, falta de descanso y vacaciones y la discriminación laboral ejercida contra las mujeres por parte de la administración, son otras cuestiones preocupantes.