Juicio a La Manada

Los agentes navarros afirman que no buscaban otros delitos y que actuaron por orden judicial

El juez relaja la tensión entre el abogado de la defensa y el instructor de la Policía Foral que lideró el caso y que se conocían de antes
Abogado
photo_camera Agustín Martínez, declarando a las puertas de la Ciudad de la Justicia

Aparte de la clara tensión vivida entre el abogado de la defensa de los cuatro imputados de La Manada, Agustín Martínez, y el agente instructor del proceso para cotejar las imágenes de los casos de Pamplona y de Pozoblanco perpetrado por los acusados, que hasta el propio juez del Juzgado de lo Penal 1, Luis Javier Santos, ha tenido que mediar entre ellos para relajar el ambiente sabedor de que se conocen de antemano.

En cualquier caso, tanto el instructor como el agente de la Policia Foral de Navarra que estuvo presente en todo el proceso de cotejo de imágenes y que elaboró luego los informes, han dejado claro que se actuó en todo momento bajo instrucciones del juez de Pamplona, que no se les ordenó en ningún caso buscar más delitos que pudieran haber cometido los cuatro acusados y que la comparación de imágenes con cualquier otros videos que aparecieron durante la investigación era para poder terminar detalles que permitieran indicar qué hizo cada uno de ellos en los hechos de Pamplona.

Y es que había videos (seis de Pamplona) en los que sólo aparecían penes, muñecas, pies o tatuajes "que debían de ser perfectamente identificados, con lo que para ello podían servir de nuevo material aparecido en el terminal de uno de los acusados.

De este modo, parece ponerse en entredicho al intento de la defensa de los imputados de tratar de demostrar que la obtención de los videos de Pozoblanco se hizo de forma ilícita al no tener ni control judicial ni tener relación directa con el caso de pamplona o dicho de otro modo que se buscara cualquier delito cometido por los acusados al margen de lo ocurrido en Sanfermines.

Seguirá ampliación