Tribunales

El juez de Peñarroya archiva la causa de Miguel Blesa por considerarlo un suicidio

Las declaraciones de los testigos en el tribunal casan con los resultados de la autipsia y las diligencias de la Guardia Civil en este sentido

Blesa
photo_camera Llegada a la capital cordobesa del cadáver de Miguel Blesa

La causa de la muerte del expresidente de Caja Madrid Miguel Blesa ya está clara: Fue un suicidio. Así lo ha determinado el juez titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción 2 de Peñarroya-Pueblonuevo que la investigaba y que ha decidido archivar la causa una vez que las declaraciones de los diferentes testigos en el tribunal van en consonancia con el informe del forense en la autopsia y el propio atestado de la Guardia Civil, según ha informado el periódico El Independiente en su edición de ayer.

El exbanquero falleció de un disparo a quemarropa recibido en el pecho durante una de sus habituales visitas a la finca cordobesa Puerto del Toro, en Villanueva del Rey, utilizando para ello una escopeta de caza de su propiedad. Ésa fue, igualmente, el resultado de la autopsia practicada a cadáver antes de su incineración en su Linares natal.

Según la misma fuente, el magistrado, con el visto bueno del Ministerio Fiscal, dictó auto el pasado 10 de octubre, ya que "desde el punto de vista jurídico-penal, no hay ningún dato que indique otra causa de muerte", como pudiera seres caso de un fatal accidente.

Entre otras diligencias practicadas, el juez ha tomado declaración en calidad de testigos a las personas que se encontraban en la finca cuando Blesa fue hallado muerto: el gestor cinegético Rafael Alcaide y los dos guardas de las instalaciones. Ellos fueron los que, alertados por el ruido del disparo, descubrieron el cuerpo del ex banquero tumbado en el suelo junto a su vehículo.

Llegó a las dos de la madrugada

El expresidente de Caja Madrid viajó de Madrid a Villanueva del Rey en la noche del martes al miércoles. A la finca, situada a unos siete kilómetros de este municipio, llegó a las dos de la madrugada. Tras descansar unas horas, se levantó de la mesa cuando desayunaba con la excusa de mover de sitio su coche para ir a la zona de cocheras. Varios medios de comunicación señalaron ayer que antes de esto preguntó a su amigo y gerente de Puerto del Toro: "¿Tienes el teléfono de mi mujer, por si tienes que llamarla?".

En la zona de cocheras cogió un rifle del maletero, con el que se fue hasta la parte delantera del vehículo, apoyando la culata del arma en el suelo y situando su pecho sobre el cañón. Acto seguido, accionó el gatillo. Efectuó un único disparo, que provocó que el cuerpo del expresidente de Caja Madrid golpeara con el capó, deslizándose hasta caer desplomado en el suelo junto a una de las ruedas.

El suicidio se producía cinco meses después de que la Audiencia Nacional lo condenara a seis años de prisión por apropiación indebida en el caso de las tarjetas black -tras gastar 436.688 euros con cargo a su tarjeta- y antes de que el Tribunal Supremo revise la sentencia. Blesa también estaba imputado por los sobresueldos que se repartió la cúpula de Caja Madrid y por la emisión de participaciones preferentes (pieza separada del caso Bankia), extinguiéndose su eventual responsabilidad penal con su fallecimiento.