El Grupo Municipal de IU ha alertado del descenso en el número de ayudas de emergencia y familiares concedidas durante el pasado mes de abril, 20% y 60% menos respectivamente, y todo porque el gobierno municipal se ha quedado “sin crédito”, tal y como ha confirmado el propio gobierno en la última comisión social de pleno.
Desde IU ponen de manifiesto la “nefasta gestión y el desinterés” del alcalde y de su equipo de gobierno con las políticas sociales pero, sobre todo, señalan que “esta es una de las consecuencias más graves de no tener aprobado, a 8 de mayo, el presupuesto de 2021 y también de no tener cargado el superávit correspondiente a 2020”.
En una nota de prensa IU manifiesta que les parece “muy triste”que pueda haber personas y familias que lo estén pasando muy mal, que requieran de una ayuda inmediata de su Ayuntamiento para cubrir sus necesidades básicas de alimentación o del pago de facturas y que no puedan tener esa ayuda por “la desidia e inoperancia del gobierno municipal más caro de la historia”.
La desidia para IU "también se ve reflejada en infraestructuras sociales como el Centro de Emergencial Habitacional, para el que pedimos “prioridad”, puesto que Córdoba no puede perder ni un minuto más para contar con un recurso habitacional esencial, sobre todo si tenemos en cuenta la situación de crisis social y económica que estamos viviendo como consecuencia del covid-19"″.
Desde IU volvemos a exigir al gobierno de PP y Cs que acelere la finalización de las obras de estas instalaciones, que son muy necesarias y cuya ejecución quedó bloqueada en 2019 por un vicio oculto, señalan.
Se trata, recuerdan desde IU, de un recurso municipal planteado en el anterior mandato para dar respuesta a los episodios puntuales de emergencia que pudieran surgir, con el objetivo de que aquellas personas que se vieran obligadas a dejar sus viviendas por diversas causas (desahucios, incendios, violencia machista…) tuvieran garantizado un techo digno de forma provisional hasta contar con una alternativa.
Para IU, se trata de unas instalaciones “muy necesarias” que complementan al resto de recursos con los que cuenta la Delegación de Servicios Sociales, y que lo serán aún más a causa de la crisis derivada del covid-19, que “está llevando y llevará a muchas familias a situaciones límite”.