Se ha notado, y mucho, la celebración del ya instaurado oficialmente 'macrobotellón' de Miércoles de Feria (coincidiendo en horario con lo que se ha dado en llamar el Día del Niño en la calle del Infierno) en el parte de incidencias policiales de ayer.
Por lo pronto, en intoxicaciones etílicas. Se han registrado nueve, si bien hay que significar que todas ellas se han producido en el turno de noche, mientras que el 'macrobotellón' se podría considerar de tarde. Eso sí, los efectos generalmente se dan a conocer algo más tarde, como parece haber sido el caso. Otro elemento que define la existencia de esa curiosa fiesta estudiantil son los accidentes con cristales, y eso que la subdelegada del Gobierno, Rafi Valenzuela (PSOE), fue lo primero que advirtió: "Ya que habrá botellón, pedimos que se acuda con recipientes de plástico en lugar de cristales para evitar accidentes". Pues ni por ésas. El parte de incidencias recoge hsta cuatro atenciones sanitarias por heridas de caídas y cristales, de las que una fue en el turno de tarde y tres más, en el de noche.
Por supuesto, como se había advertido de antemano por el concejal de Seguridad, Miguel Ángel Torrico (PP), la Policía ha estado controlando, y evitando, el acceso de menores al macrobotellón. De ahí que se hayan producido hasta 61 identificaciones (48 de tarde y 13 nocturnas), "realizadas la mayoría en zona de acceso al botellón para comprobación de dad", detalla el parte policial.
Eso implicó un fuerte incremento de las pruebas de alcoholemia, ya que se practicaron un total de 77, de las que 37 fueron de mañana (?) y 40 en el turno de tarde. Felizmente, "todas salieron negativas".
Finalmente, y relacionado con la ingesta de bebida masiva a pleno sol en el Balcón del Guadalquivir, la Policía intervino un altavoz de grandes dimensiones en la zona del botellón, así como tres denuncias más por orinar en vía pública, que es uno de los efectos directos del mucho beber, muy a pesar de que Sadeco había aportado urinarios portátiles para la ocasión (quizá hagan falta más para próximas ediciones). Que no les falte de ná, como dice la canción.
De forma indirecta, quizá por intuir que la juventud requiere de grandes ingestiones de comida por puro metabolismo y para amortiguar el efecto de la bebida, hubo cuatro cierres de establecimiento por incumplir el horario: Todas hamburgueserías y comida de kebab. Proteína para el cuerpo.
Para no variar, el parte incluye el consabido problemilla entre porteros de casetas y clientela. En esta ocasión no sólo por denuncias por no dejar entrar al interior de un caseta (se dieron hasta tres en una Feria supuestamente abierta, una de tarde y dos de noche), sino por agresión, y al parecer ha sido de forma mutua. La Policía ha incluido dos denuncias por agresión, ambas de noche, una de ellas a un portero y otra de ellas por agresión al portero. En fin.
Más situaciones agresivas. una riña sin acometimiento en el turno de tarde y otra más en el de noche, tres reyertas en las que se llegaron a las manos (una de tarde y dos de noche), además de que se intervino por la tarde un arma blanca que menos mal no llegó a utilizarse.
Por venta ambulante hubo cuatro intervenciones, con hasta 12 intervenciones de mercancías que no tenían permiso para ser vendidas y hasta 18 pérdidas de objetos en el recinto ferial.
Una jornada movidita.
