El Juzgado de Primera Instancia número 7 de Córdoba acaba de anular un préstamo bancario que, tal y como define literalmente el magistrado titular, "era un negocio ruinoso para el Ayuntamiento de Córdoba", ya que por un principal de 3 millones de euros firmados a 12 de abril de 2007 el Consistorio lleva pagados a fecha de 10 de noviembre de 2021 la cantidad de 9.627.381,44 euros, de los que 6.797.192,11 euros son intereses y los 2.830.189,33 euros restantes son de capital propiamente dicho.
Así lo ha informado esta mañana el concejal de Hacienda, Salvador Fuentes (PP), quien ha detallado que el contrato con el entonces Liberbank SA (ahora Unicaja Banco SA) firmado por el que era edil de Urbanismo, Francisco Tejada (IU), acabó implicando un interés acumulado del 132,44%, "y tuvo que ser José María Bellido, cuando era portavoz del PP, quien en marzo de 2015 llevó esta situación perniciosa y dañina ante un juez".
El préstamo vencía en mayo de 2022 (una operación por 15 años) y al producto se le estuvo aplicando el 2,30% hasta el año 2010. Pero a partir de ahí los intereses aplicados fueron variables hasta agosto pasado, de modo que alcanzaron prácticamente un 133% acumulado, lo que "supone una barbaridad", en palabras de Fuentes.
Ahora la sentencia del juez declara nulo el acuerdo y dice de forma salomínica que las dos partes reintegren lo aportado y que se aplique el interés legal y correcto a los 3 millones de préstamo que fue lo solicitado en su día. Es decir, borrón y cuenta nueva para partir de los 2,8 millones ya amortizados del principal por el Consistorio al banco.
"Ellos nos tienen que devolver los más de 6,7 millones cobrados en intereses" y el Ayuntamiento pagar al banco los intereses correspondientes a dos cuotas que quedan pero a un precio normal. Cuestión para la que se tendrán que poner de acuerdo los técnicos de ambas partes. "No entiendo cómo en 2007 el Ayuntamiento firmó un contrato tan ruinoso para el interés general de la ciudad y alguien tendrá que dar explicaciones, pero al menos ahora el juez nos da la razón en este despropósito para el Ayuntamiento", ha señalado Fuentes.
El edil ha explicado que se optó por la vía judicial al entender que "era mucho más leonino y terrible amortizarlo que seguir pagando", de forma que "costaba más cancelar la operación que seguir pagando intereses absolutamente abusivo".
