MEDIO AMBIENTE EN LA CAPITAL

Emacsa no aplicará cortes de agua ante la alerta por sequía y asegura que hay suministro para dos años

El presidente, Jesús Coca, afirma que las medidas de ahorro no afectan al llenado de las piscinas
Francisco Ruiz Rodríguez, Isabel Albás, Jesús Coca y Rafael Carlos Serrano
photo_camera Francisco Ruiz Rodríguez, Isabel Albás, Jesús Coca y Rafael Carlos Serrano

Tras haber estado el pantano del Guadalmellato dos meses seguidos por debajo de 53 hectómetros cúbicos de agua almacenada, la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) ha puesto en marcha el protocolo para estas ocasiones y se ha decretado el estado de alerta por sequía en Córdoba capital. Eso implica que Emacsa, la Empresa Pública Municipal de Aguas, va a tener ahora que aplicar una serie de medias correctoras para ahorrar agua, que, en ningún caso, va a suponer, por ahora, cortes del suministro, como ya se han producido en otros municipios de la provincia, por lo que "somos unos afortunados", según ha expuesto esta mañana Jesús Coca (PP), su presidente.

El Guadalmellato es el principal pantano que abastece a la ciudad de agua bruta, es decir que no ha sido tratada previamente en la estación de Villa Azul, pero "ya sabíamos que esto iba a pasar, porque lleva sin llover desde hace mucho tiempo y no lo hará, por lo menos, en los próximos tres meses", ha indicado Coca.

Isabel Albás y Jesús Coca, en Emacsa
Isabel Albás y Jesús Coca, en Emacsa

Esas medidas, que han sido puestas sobre la mesa por una comisión técnica, y que son más bien preventivas y previsoras, incluyen una monitorización diaria de la situación del pantano de referencia para la capital, un plan de ahorro de agua que permita hacerlo en un 5% en el tiempo que dure este estado de alerta y una buena campaña de concienciación a la ciudadanía para que en los hogares no se derroche. Aún así, el presidente de Emacsa ha señalado que las medidas no afectan al llenado de piscinas, por lo que "pueden llenarse".

El plan de ahorro de grandes consumidores urbanos de agua implica, por ejemplo, la reducción la lámina de agua de las fuentes y reducir el consumo en fuentes ornamentales. Las campañas de concienciación para ahorro de agua hablan, por ejemplo, de cerrar los grifos cuando no sea necesario al lavarse los dientes, afeitarse, fregar la vajilla o incluso ducharse (por ejemplo, a la hora de enjabonarse).

Jesús Coca y Rafael Carlos Serrano, presidente y gerente, respectivamente, de Emacsa
Jesús Coca y Rafael Carlos Serrano, presidente y gerente, respectivamente, de Emacsa

A nivel técnico, Coca ha indicado que se va a usar agua del pantano de San Rafael de Navallana y aquí ha hecho una advertencia sobre un posible cambio en el sabor, como ya de hecho ha ocurrido "hace relativamente en Córdoba". El presidente ha explicado que el agua que nos estamos bebiendo ahora procede del fondo del embalse, es decir la que se recogió hace dos años y por "motivos organolépticos cambia de sabor", y algo similar ocurrirá cuando se mezclen ambas aguas que tienen diferencias de salinidad.

La parte de Sadeco

Por su parte, Isabel Albás (PP), como presidenta de Sadeco, ha recordado que desde mediados de 2022 esta empresa municipal estableció una serie de medidas para optimizar el uso del agua del baldeo, pasando de circuitos diarios a días alternos a cada cuatro días. Por ahora, eso ha supuesto un ahorro del 50% de agua usada en comparación a 2018. Ese año cada semana se destinaban un millón de litros a baldear las calles y a partir de ahora no llegaremos a los 140.000 litros semanales. Ese agua "garantiza la limpieza y salubridad en las calles pequeñas para eliminar orines y los restos que, por ejemplo, dejan las palomas", ha indicado.

Sadeco asegura que el baldeo de las calles de la capital cordobesa se hace ya con agua no potable

Y a partir de hoy "se va a restringir más el baldeo manual por esta situación de alerta", según Albás, y para algunos casos y zonas de la ciudad se va a sustituir por baldeo mecánico. El manual se hará en la Avenida de América, Alfaros, Capitulares, San Fernando, Puerta del Puente, interior de la Judería y Puerta Gallegos.

Francisco Ruiz Rodríguez e Isabel Albás, en Emacsa
Francisco Ruiz Rodríguez e Isabel Albás, en Emacsa

Preguntada al respecto, Albás ha asegurado que todo el baldeo de calles que se lleva a cabo en la ciudad se hace ya con "agua no potable".

De igual modo, Jesús Coca ha querido dejar claro que si hay agua garantizada para dos años es porque desde Emacsa se han aplicado medidas de ahorro, tales como tener el 96% de la red hídrica renovada, lo que permite que las mermas sean inferiores al 10%, frente al 25% de la media del resto de empresas de agua el país. "Eso ha permitido reducir el consumo en las últimas dos décadas un 20%".