El cantaor flamenco Francisco Crespo Aguilar, conocido artísticamente como Lucas de Écija, ha fallecido a los 88 años de edad, según ha informado su propio Paco Jémez, entrenador de las Palmas, a través del club deportivo. Sin ser cordobés, ya que su origen estuvo en la localidad sevillana de Écija, en el año 1935, desde joven acudía al barrio de la Judería cordobesa a disfrutar y aprender del flamenco más cordobés.
Por destacar del artista, todos recordarán sus fandangos, Romance a Córdoba, sus bulerías y sus cantes por malagueñas. Entres sus éxitos se encuentra el disco grabado con Chiquito de Osuna, y el acompañamiento al baile como cantaor oficial de Sara Lezana, junto a otras bailaoras cordobesas.
La capilla ardiente el cantaor se encuentra en el Tanatorio de El Granadal de la capital cordobesa, donde permanecerá hasta el sepelio que tendrá lugar mañana lunes 22 de enero.