Desde que el pasado 19 de febrero se empezara a aplicar el método CER (captura, esterilización y retorno) a las colonias felinas de Córdoba, tras la firma del correspondiente convenio de colaboración entre la Federación de Asociaciones Protectoras de Animales de Córdoba (Fapac) y la empresa pública municipal Saneamientos de Córdoba (Sadeco), se ha esterilizado a un total de 1.000 gatos.
Ello ha sido posible, según ha informado Fapac en una nota, con la actuación en 57 colonias felinas de la ciudad, "de las que 48 ya tienen un control poblacional superior al 80 por ciento". Además, de 23 de esas 57 colonias "están controladas al 100 por 100 con la vigilancia debida para mantener su estabilidad".
Esta intervención para el control de la población de gatos en Córdoba "se ha realizado, entre otros lugares, en instituciones municipales y de la Junta de Andalucía, como son residencias de ancianos, cementerios, centros educativos, conventos y otros lugares emblemáticos, como el Templo Romano y el Alcázar de los Reyes Cristianos", y ha tenido "una acogida sin precedentes entre trabajadores, vecinos, usuarios y visitantes de nuestra ciudad".
El método CER "está reconocido como el único método científico, efectivo y definitivo, que optimiza el dinero público, convirtiéndonos en una ciudad 'Catfriendly', donde se está aplicando la correcta metodología que exige el método CER".
El "éxito" de estos resultados, según ha resaltado Fapac, "llega de la mano del Ayuntamiento, que apostó por un proyecto sólido, con un presupuesto gestionado por Sadeco, para castraciones, vacunas, desparasitación y recursos".
También se debe al "Colegio de Veterinarios, que enseguida quiso participar, con la organización de un turno de oficio, donde se implicaron 24 clínicas veterinarias y con la aportación de chips y vacunas contra la rabia, para proteger a los gatos".
Pero dicho éxito es mérito también, según ha subrayado Fapac, de "la labor incesante y hasta ahora poco reconocida de las personas que cada día cuidan de las colonias felinas y que, junto a compañeras voluntarias que prestan su experiencia en las capturas y realizan los transportes diarios, forman un equipo perfecto".
Todo el proyecto tiene, según ha recordado Fapac, "un propósito claro: la convivencia de los gatos, protegidos, controlados y sanos, con los vecinos de nuestra ciudad, que día a día nos demuestran su satisfacción con los resultados, ya que ven como sus barrios se han vuelto más silenciosos, que lo gatos están sanos, que no hay camadas, que se hacen invisibles, y nos lo demuestran aplaudiendo desde sus balcones, ayudando en las capturas y agradeciendo nuestro trabajo".
