manipulación de los tiempos

CTA denuncia en Aucorsa presiones para cumplir horarios "imposibles"

La dirección está realizando careos con conductores que supuestamente "han bajado el ritmo" con amenazas de sanciones

CTA aucorsa
photo_camera Custodio Sánchez, en la sede de la CTA en el Ayuntamiento de Córdoba

Se viene advirtiendo desde hace tiempo, pero, al parecer, la situación de los trabajadores de Aucorsa no ha cambiado en exceso. Según ha señalado esta mañana el delegado de la CTA en la empresa pública, Custodio Sánchez, los ritmos de trabajo siguen siendo estresantes, porque la empresa obliga a su plantilla con presiones literalmente "a correr" para recorrer los circuitos de las líneas y eso "tiene consecuencias nocivas para los conductores, que no dan abasto, y para los usuarios, porque no es seguro".

Así, la dirección de Aucorsa ha marcado unas pautas sobre frecuencias y horarios "imposibles de mantener" y para cumplirlo tienen que desaparecer los tiempos de descanso en las cabeceras de los recorridos de entre cinco y 10 minutos, que son obligatorios. "Los tiempos están siendo manipulados, falseados, porque los displays (pantallas informativas) saltan antes de llegar a la cabecera, y a eso se suma el tiempo en que se sube y se baja el pasaje, la recogida del dinero y demás que van comiendo tiempo al descanso", ha criticado Custodio, quien siguiendo su cálculo, al final "sólo quedan un par de minutos de descanso y a volver a correr, con la fatiga acumulada que eso supone y la consiguiente merma de reflejos".

Algo que se ha comunicado al gerente de la empresa, Juan Antonio Cebrián, del que "no hemos recibido respuesta".

Y no sólo existe este problema. Desde la empresa también se están aplicando medidas de presión como llamadas a careo a conductores para preguntarles los motivos del incumplimiento de los horarios forzados. Se ha llamado ya a dos conductores acusados de bajar el ritmo de trabajo. "No te dicen que corras pero te ponen horarios y si no se cumplen corres el riesgo de recibir una sanción, cuando hay multitud de circunstancias que pueden impedir cumplir ese horario".

Al margen del malestar creado en el seno de la plantilla por estas "prisas", la CTA ha denunciado también que se quiere cubrir ahora, mediante sistema de selección interna, una plaza de jefatura de negociado. El caso es que "ya está cubierta" y ahora se quiere conceder a esa misma persona "a dedo y con nombres y apellidos", lo que implica una "clara discriminación para toda la plantilla", porque ele requisito para concederla es haber desempeñado ya esa tarea. Una plaza que, por cierto, implica "todo un despilfarro económico público, puesto que son 8.000 euros anuales "que no hacen falta".

Respuesta de Aucorsa a la CTA

Por su parte, Aucorsa, la empresa pública municipal de autobuses de Córdoba, garantiza la seguridad de sus trabajadores y usuarios, según ha manifestado este jueves la dirección de la misma, para rechazar las falsedades vertidas desde el sindicato CTA sobre que se está "obligando a correr a los conductores" para cumplir la hoja de ruta y las frecuencias de las líneas.  

La dirección de Aucorsa asegura que los tiempos de cada línea se planifican priorizando siempre la seguridad de los usuarios y de los trabajadores. De hecho, a pesar de los avances introducidos en el año 2014 en la forma de pago, con la introducción de la tarjeta sin contacto, la velocidad comercial ha sido en el año 2018 de 12,33 kilómetros por hora frente a los 12,30 Kilómetros por hora del año 2014, es decir, prácticamente la misma.  

Durante ese periodo de tiempo 1.040.050 usuarios han utilizado la tarjeta sin contacto y han dejado de utilizar el billete sencillo como medio de pago.

Se desprende de ello que el ahorro temporal que ha supuesto la introducción de la tarjeta ha beneficiado principalmente a los trabajadores, que disponen de más tiempo para hacer el servicio y para descansar en los terminales de las líneas.

Ataques injustificados 

La dirección de Aucorsa lamenta profundamente los ataques injustificados que, faltando sistemáticamente a la verdad, se hacen por parte de un representante sindical que en la actualidad pertenece a otro sindicato distinto a la organización por la que concurrió a las pasadas elecciones sindicales. 

Los conductores que, según dicho este representante sindical en rueda de prensa, se saltan los semáforos en rojo, incumplen las normas del código de circulación y ponen en peligro la seguridad de los ciudadanos. No hay nada que justifique una infracción tan grave y mucho menos el recurso manido a la falta de tiempo para hacer la línea, ha censurado la dirección de Aucorsa.

La velocidad comercial se mantiene desde 2014 

La evolución de la velocidad comercial desde el año 2014 ha sido la siguiente: 2014 (12,30 kilómetros por hora), 2015 (12,17 kilómetros por hora), 2016 (12,06 kilómetros por hora), 2017 (11,99 kilómetros por hora) y 2018 (12,33 kilómetros por hora), es decir durante los años 2015, 2016 y 2017 se ha ido más lento que en el año 2014, a pesar de las mejoras que ha supuesto la introducción de la tarjeta sin contacto como medio de pago. Solo en el año 2018 se ha superado en 3 décimas, 30 kilómetros por hora la velocidad del año 2014.  

En relación con las acusaciones vertidas sobre el "supuesto regalo que el director gerente de Aucorsa quiere hacerle a una persona", la empresa informa de que los gerentes de las empresas públicas del Ayuntamiento de Córdoba no participan en los procesos de selección internos ni externos.

Las bases de las convocatorias las aprueba el Consejo de Administración. Los tribunales de examen están formados tal y como establece el convenio colectivo, por trabajadores de la empresa, en representación de la propia empresa, del comité de empresa y de las secciones sindicales con representación en el comité de empresa.

Por último, la empresa manifiesta que no ha negado un local a la sección sindical de CTA, ya que cuando estaba haciendo gestiones y pidiendo presupuestos para acondicionar un local para tal fin, tuvo conocimiento de que los delegados sindicales elegidos por CCOO y ahora en CTA habían ocupado la sala de reuniones del Comité de Empresa, sala en la que precisamente se iban a llevar a cabo las labores de adecuación necesarias para tal fin.