PATRIMONIO HISTÓRICO

Córdoba participa en el VII Encuentro Ibérico de Gestores del Patrimonio

La delegación cordobesa ha estado presidida por la teniente de alcalde delegada de Casco Histórico, Laura Ruiz, que ha trasladado iniciativas ante los más de 150 expertos y gestores que han participado
Imagen de algunos de los participantes en este encuentro sobre patrimonio
photo_camera Imagen de algunos de los participantes en este encuentro sobre patrimonio

La teniente de alcalde delegada de Patrimonio Histórico, Laura Ruiz, ha participado en el VII Encuentro Ibérico de Gestores del Patrimonio, organizado por el Ministerio de Cultura de Portugal y España, que ha abordado los desafíos de la sostenibilidad de los bienes protegidos por la Unesco y su entorno.
 
Laura Ruiz defiende que el encuentro -celebrado en el archipiélago de Las Azores- ha puesto de manifiesto que “la cuestión de la sostenibilidad plantea numerosos desafíos a los gestores del patrimonio mundial a los que les corresponde, como técnicos y ciudadanos, reflejar los mejores modos de compatibilizar la salvaguardia y la protección con el desarrollo de estos espacios”.
 
“Este encuentro ha confirmado la importancia de desarrollar Planes de Gestión Sostenible para conocer la situación actual de un espacio protegido, identificar sus problemas, elaborar una estrategia de actuación que evite actuar con improvisaciones, puesto que el objetivo último es que se mantenga la autenticidad y se proteja la integridad del bien integrado en la lista Unesco”, reflexiona la delegada.

En este sentido, Laura Ruiz que el trabajo de la delegación de Casco  Histórico del Ayuntamiento de Córdoba va en esa línea con la puesta en marcha del trabajo de la Mesa del Casco Histórico que será espacio de diálogo para elaborar el Plan de Gestión de nuestra zona Patrimonio Mundial.

Ruiz apuntó que el encuentro celebrado en Portugal alertó de que no debemos “negativizar el turismo”, sino “buscar fórmulas que nos ayuden a gestionarlo mejor”. “Hay que trabajar para aumentar la experiencia de la visita agradable de los visitantes, rebajar el estrés en los trabajadores, generar recursos económicos que sean reinvertidos en la comunidad, evitar expulsar a los residentes de sus propios centros históricos y del disfrute de sus fiestas y sus monumentos, lo que provoca la ruptura del lazo de identidad del local con el bien”, recalcó.
 
“En este sentido, reflexiona Ruiz, se hace imprescindible para una buena gestión sostenible del patrimonio hacer partícipe a la comunidad que vive y trabaja en la zona Patrimonio Mundial desde la primera etapa de la gestión hasta la última, minorando en los posible los impactos negativos y revertiendo en ese entorno los beneficios que el patrimonio genera; ése es el reto del trabajo iniciado por el gobierno municipal”.