El equipo blanquiverde no sólo lucha por su nuevo objetivo en la Segunda División del fútbol, que no es otro ahora que la pura permanencia, sino que también tiene tiempo para hacer felices a una parte de la afición a la que hay que mimar desde el primer minuto: Los niños.
En esta ocasión, y aprovechando que el próximo sábado, día 4 de febrero, es el Día Mundial contra el Cáncer, y de que el club había ya contactado con el Hospital Universitario Reina Sofía para poder realizar su tradicional visita a la planta de Oncología, hoy se ha pasado por el centro hospitalario toda la plantilla para estar un rato con todos los niños que hay ahora mismo ingresados, y que suman unos cincuenta.
De hecho, los jugadores traían consigo otros tantos regalos en forma de fundas de móvil, mochilas, minibalones o pequeños muñecos de Koki, la mascota del club, a modo de excusa para dar un poco de ánimos a los enfermos, pero también recibir de ellos palabras directas de aliento, que buena falta, y también de alabanza, porque muchos de ellos son ídolos directos de los chavales. "Se vuelven locos", comentaron desde fuentes del Hospital para indicar la sensaci´n que produce la presencia anual de los jugadores cordobesistas en las plantas del Reina Sofía... Y no sólo entre los más pequeños, sino también entre el personal médico, de servicios y de enfermería.
