Consejos para gastar menos luz con tu termo eléctrico en este invierno

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Para ducharse, limpiar la casa y realizar innumerables actividades, la utilización del agua caliente en un hogar es imprescindible. En el invierno, resulta más evidente su utilidad y es por ello que la presencia de un termo eléctrico en casa es necesaria. A pesar de ello, tenerlo no implica tener todas las ventajas, sino que también implica cuidar el consumo eléctrico.

Todos los aparatos de calefacción, refrigeración, climatización y electrodomésticos que funcionan a alta potencia consumen bastante energía, incluso aquellos que son de bajo consumo o con alta eficiencia energética. Sin embargo, aparte de siempre decidirse por la elección de un termo de bajo consumo para toda la familia -sin que ello influya en las capacidades del mismo-, saber cuáles son los principales consejos para ahorrar en el gasto de la luz al utilizarlos es una de las cuestiones más importantes.

Programar horarios

Una de las virtudes de los termos eléctricos con respecto a los calentadores convencionales es que pueden calentar grandes cantidades de agua en muy poco tiempo. Por esa razón, no es necesario que los termos eléctricos estén siempre funcionando ni que funcionen más tiempo del que realmente es necesario.

Comprar un termo que incorpore funciones de programación de horarios, temperaturas o potencia es una buena opción, ya que permitirá que se utilicen las franjas horarias donde la luz sea más barata, o bien, que se utilicen solo el tiempo debido. Aunque parezca que se hace un uso eficiente sin esta cualidad, el ahorro que puede llegar a suponer este simple hábito tecnológico puede ser demoledor.

Discriminación horaria

Desde luego, y algo para lo que el programador digital de los termos modernos será útil, aprovechar las tarifas de discriminación horaria es la mejor manera de calentar el agua necesaria para la casa sin tener que pagar tanto dinero. Es algo esencial y si se cuenta con un termo eléctrico de última generación será muy fácil de hacer, porque no habrá que encenderlo manualmente.

Si el termo no es tan nuevo, comprar un programador digital compatible puede ser una decisión acorde.

Mejorar las condiciones de aislamiento

El aislamiento térmico y mantener la temperatura del agua de los termos eléctricos son conceptos inseparables. Por esa razón, la OCU estima que solo en términos de aislamiento insuficiente se pierden hasta 40 euros al año por concepto de gasto adicional de luz, solo en lo que hace referencia a la utilización de termos para calentar el agua.

Utilizar aislantes de última generación, como la lana de vidrio, puede ser una solución tajante para cubrir la superficie exterior del equipo. Aparte de mantener el agua más caliente por más tiempo, se ahorrará energía porque trabajará mucho menos.

La ubicación del termo eléctrico

Por una cuestión simple de distancia entre las tuberías, los termos eléctricos que se instalan cerca del baño consumirán menor cantidad de energía que aquellos que se instalen en el exterior de las viviendas o en los tejados, como es muy común.

El tiempo que le toma enviar el agua hasta las tuberías implica un consumo extra de energía eléctrica, sobre todo considerando que el agua caliente se gasta más en el área de la ducha antes que en cualquier otro espacio de la casa.

Lavar con temperatura ambiente

Aunque pueda parecer una solución sanitaria y de cuidado de las prendas bastante efectiva, la verdad es que la mayoría de las prendas de vestir se pueden lavar completamente con agua fría, dejando los ciclos de lavado con agua caliente para situaciones muy específicas, como las prendas con manchas de grasas o prendas que por su contacto con superficies contaminadas -por ejemplo- deban ser limpiadas de otra manera.

El consumo energético del agua caliente en lo que se refiere a los ciclos de lavado puede llegar a equipararse con el consumo de agua caliente para ducharse en casa, de manera que el consejo puede tener una incidencia grande en el ahorro de luz.