SUCESOS

Un conductor con seis veces la tasa de alcohol permitida se sale de la carretera y choca contra la cuneta

El conductor investigado se enfrenta a la posibilidad de que se le imponga una pena de prisión de tres a seis meses, multa de seis a 12 meses o la de trabajos en beneficio de la comunidad de 31 a 90 días
Control de alcoholemia
photo_camera Control de alcoholemia

La Guardia Civil investiga al conductor de un turismo supuestamente implicado en un accidente de circulación, sextuplicando la tasa de alcohol permitida, pues arrojó un resultado de 1.46 mg/l en la prueba de alcoholemia que se le practicó, que ocurrió sobre las 7,00 horas del pasado 3 de noviembre, cuando el conductor se dirigía a su lugar de trabajo en Villa del Río (Córdoba).

En concreto, según ha informado la Benemérita, el accidente de tráfico, consistente en la salida de vía del turismo que conducía el ahora investigado y su posterior choque contra la cuneta, tuvo lugar en el kilómetro 9,900 de la carretera A-3101 (A420-Villa del Río).

A raíz de ello, la Guardia Civil del Subsector de Tráfico de Córdoba ha investigado al hombre que conducía el vehículo por la presunta comisión de un delito contra la Seguridad Vial, por conducir un vehículo bajo la influencia de bebidas alcohólicas.

El conductor, de 37 años de edad, arrojó el mencionado resultado positivo en la prueba de alcoholemia de 1.46 mg/l, sextuplicando de este modo la tasa de alcoholemia permitida, ya que el máximo permitido es de 0,25 mg/l, para las circunstancias de este conductor.

En consecuencia, el conductor investigado se enfrenta a la posibilidad de que se le imponga una pena de prisión de tres a seis meses, multa de seis a 12 meses o la de trabajos en beneficio de la comunidad de 31 a 90 días y, en cualquier caso, con la de privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores por tiempo superior a uno y hasta cuatro años, según el artículo 379.2 del Código Penal.

Una elevada tasa de alcohol en el organismo, según ha recordado el Instituto Armado, tiene repercusiones sobre el comportamiento, tales como que se infravaloran los efectos y las alteraciones que el alcohol tiene sobre su rendimiento en la conducción, pues el conductor suele tener una falsa seguridad en sí mismo y sobrevalora su capacidad para la conducción, lo que le llevará a tolerar un mayor nivel de riesgo.

De igual modo, con elevadas tasas de alcohol, disminuye el sentido de la responsabilidad y de la prudencia, y pueden aumentar las conductas impulsivas, agresivas y descorteses, además de que se den alteraciones en las funciones perceptivas, en la atención y en la psicomotricidad, cometiéndose muchas más infracciones.