CRISIS EN EL COGOBIERNO DE LA CAPITAL

Cs no teme la entrada de María Luisa Gómez para sustituir a Eva Timoteo en el Ayuntamiento

David Dorado asegura que hay una lista electoral y hay que tirar de ella, pero desconoce si se ha contactado con la interesada
David Dorado en rueda de prensa
photo_camera David Dorado en una rueda de prensa

El cuarto teniente de alcalde y concejal delegado de Infraestructuras, Sostenibilidad y Medio Ambiente, David Dorado (Cs), ha asegurado esta mañana que el sustituto de Eva Timoteo como concejal en el Ayuntamiento , tras su renuncia de ayer al escaño, será "a quien le toque entrar de la lista electoral". Algo lógico, si no fuera porque se trata de María Luisa Gómez, la exgerente del Instituto Municipal de Deportes (Imdec), que tiene pendiente un pleito con el concejal del ramo, Manuel Torrejimeno (Cs).

"¿Miedo a que entre? Ninguno", ha señalado Dorado a preguntas de los periodistas. "No tengo problema alguno con ella", ha indicado, para añadir que "perdí el contacto hace tiempo con ella por motivos de trabajo, pero siempre me llevé bien y posiblemente hará un buen trabajo si entra".

Dorado, en cualquier caso, ha reconocido desconocer si se han producido contactos con Gómez para saber si quiere entrar como concejal o renuncia a esa posibilidad. "No me consta", se ha limitado a responder.

La situación no es tan sencilla. Ayer el portavoz del PP en el Ayuntamiento, Miguel Ángel Torrico, pidió públicamente al Grupo naranja que "resuelvan la situación de la incorporación de un nuevo concejal cuanto antes, y sin que afecte a la estabilidad del gobierno municipal".

Visto desde los fríos números, con la marcha de Eva Timoteo y la entrada de María Luisa García, expulsada del partido, los cinco concejales de Ciudadanos serían más bien cuatro más uno (porque García entraría sin partido).

En la actualidad, para que el cogobierno pueda sacar adelante cualquier asunto le basta con la abstención de los dos ediles de Vox, ya que sus 14 concejales (nueve del PP y cinco de Ciudadanos) le daban esa mínima mayoría ante la oposición en bloque de la izquierda.

La inseguridad que aporta María Luisa Gómez a la estabilidad del cogobierno haría depender la política local en un constante voto de calidad del alcalde para romper un empate a 13 en caso de que Vox siguiera absteniéndose y la nueva edil también.

Cuando Vox apoye las decisiones de PP y Cs habría una mayoría suficiente.

En el caso de los presupuestos para 2021, a los que Vox ya ha avanzado por el momento su abstención (no su apoyo), la decisión quedaría en manos de la nueva edil, que no hay que olvidar que ha militado en Cs, lo que hace muy difícil pensar que haya dado un giro radical de mentalidad, pero todo es posible en estos tiempos.

Sea como sea, ya no será tan 'fácil' (dicho con todos las comillas del mundo) gobernar en Córdoba con esta nueva situación, a no ser que a Vox se le abran más puertas en el Consistorio de las que hasta ahora se le han abierto.