Solidaridad en tiempos de pandemia

Centro Córdoba entrega su aportación a Cáritas y llama a todos para "poner su granito de arena"

Cáritas Diocesana avisa que el problema está creciendo, seguirá haciéndolo en los próximos meses y señala que "cualquier ayuda en este sentido es fundamental"
Taberna

"Granito a granito se acaba haciendo una montaña; a mí 400 litros de leche me parece muy pocos, pero esto que hoy aportamos se une a otras muchas donaciones que permiten lo que Javier (Fernández Zabala, coordinador de Solemccor) ha llamado el milagro diario para poder atender y dar de comer diariamente a tanta gente". Manuel Blasco, presidente del Centro Comercial Abierto (CCA) Centro Córdoba, ha entregado esta mañana, en nombre de todo el comercio cordobés, 70 kilos de pasta y los ya citados litros de leche, suficientes para una jornada de atención a los necesitados en Cáritas Diocesana.

Lo han conseguido merced a sus remanentes, "ahorros", ha querido destacar el responsable de Cáritas, y porque "somos conscientes de la situación económica que nosotros mismos estamos padeciendo en las pequeñas y medianas empresas y los negocios de comercio y hostelería, pero sabemos también que hay gente que lo está pasando mucho peor", ha incidido Blasco.

Y es que Cáritas Diocesana reparte (y prepara) a diario comida para más de 2.000 personas, de las que unas 800 se preparan en las instalaciones centrales de Córdoba, siendo la pasta un alimento básico, mientras que la leche es fundamental en los hogares donde hay menores.

Parte de la pasta entregada por Centro Córdoba a Cáritas Diocesana

"Es pura cuestión de sensibilidad", indica el presidente de los comerciantes del Centro, que ya ha adelantado que intentarán volver a repetir la experiencia "lo antes posible". En su caso comenzó en el Centro, si bien "se lo comunique al resto del comercio de la ciudad para que fuera algo en conjunto", pero también del Ayuntamiento, "que siempre ha sido nuestro socio", y de Cajasur, "que siempre ha confiado en nosotros".

Según Javier Fernández Zabala, lo de hoy no deja de ser "una aportación fundamental para Cáritas", porque el problema crece día a día , "crecerá más adelante" y cada vez hay más necesidad. Frente a eso, Cáritas tiene sus limitaciones para el cocinado, "pero estamos entre todos haciendo una labor impresionante, con todo el mundo volcándose y ahora con los comerciantes, que se han unido a nosotros y es todo un detallado porque no lo están pasando nada bien; pero se han liado la manta a la cabeza y han aportado con lo que tenían ahorrado, con lo que es parte del milagro diario en el que se llenan las estanterías para poder atender a la gente", ha señalado convencido plenamente en sus palabras.

No hay que olvidar que los que están en Cáritas están hechos de 'otra pasta'.