La subdelegada del Gobierno central en Córdoba, Rafaela Valenzuela, ha presidido este viernes el acto de entrega de la XV Edición de los Premios Plaza de la Constitución 2020, que ha recaído en la Unidad Militar de Emergencias, la Brigada de Infantería Mecanizada 'Guzmán el Bueno' X, el personal del Centro andaluz de Alzheimer de Alcaracejos (Córdoba), las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad integrantes del Centro de Coordinación, la Asociación de Fabricantes Andaluces de Refrigeración (AFAR) y el personal sanitario de la provincia.
En este sentido en una nota, la Subdelegación ha explicado que el 11 de marzo de 2020 la Organización Mundial de la Salud (OMS) definió la situación de emergencia de salud pública ocasionada por el covid-19 como pandemia internacional. En este contexto, y en el marco de la 'Operación Balmis', ha sido habitual ver a hombres y mujeres militares integrantes de la Unidad Militar de Emergencias y de la Brigada de Infantería Mecanizada 'Guzmán el Bueno' X en las calles de la provincia.
Así, día a tras día, han salido a los centros sanitarios y cívicos, a las residencias de mayores, a servicios que son esenciales en el funcionamiento de la sociedad, como el abastecimiento de agua potable en barriadas de la periferia.
Además, han montado hospitales de campaña, trasladado enfermos, transportado y distribuido alimentos y medicinas, atendiendo a personas sin hogar en el albergue de Cerro Muriano, y apoyando a las fuerzas y cuerpos de seguridad. Igualmente, han colaborado en la formación para que las instituciones civiles puedan asumir algunos cometidos. En total, toda esta operación ha supuesto 310 misiones y 130 intervenciones en la provincia.
Por otro lado, ha sido reconocido el personal del centro andaluz de Alzheimer de Alcaracejos pues las personas mayores se han convertido, a nivel mundial, en el eslabón más débil en esta pandemia de coronavirus, y en España su impacto ha cobrado más importancia debido a la buena longevidad alcanzada en la población.
Prueba de la "entrega excepcional" realizada en las residencias es la del personal del Centro Andaluz de Alzheimer de Alcaracejos, que "no dudaron en tomar la firme y voluntaria decisión de confinarse junto con sus mayores para cortar cualquier acceso desde el exterior y así mitigar el riesgo ante posibles contagios por covid-19".
Asimismo, el Centro de Coordinación Operativa para la seguridad pública, conocido como Cecor, fue constituido el pasado 15 de marzo mediante la Orden del Ministerio del Interior para la coordinación y seguimiento de la ejecución de las medidas previstas en el Real Decreto por el que se declaró el estado de alarma.
Bajo la autoridad de la Subdelegada del Gobierno en Córdoba, este Centro de Coordinación está integrado por los titulares de las diferentes administraciones públicas y los representantes de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad en la provincia.
A través de este Cecor se han adoptado medidas dirigidas a proteger la salud y seguridad de los ciudadanos y contener la progresión de la enfermedad, siendo destacable la adopción de protocolos de coordinación de seguridad para la movilidad de la ciudadanía, el funcionamiento de servicios esenciales y el abastecimiento de bienes de primera necesidad a toda la sociedad cordobesa, así como el acuerdo de constitución en cada municipio de una mesa técnica de Coordinación para la seguridad Covid-19, y el auxilio a las instituciones y a los profesionales sanitarios.
ASOCIACIÓN DE FABRICANTES ANDALUCES DE REFRIGERACIÓN
Por su parte, la Asociación de Fabricantes Andaluces de Refrigeración es la columna vertebral que conforman un clúster de 26 expertas empresas cuyas propuestas tecnológicas e ideas eficientes han revolucionado el sector del frío a nivel nacional e internacional.
En España, el 75 por ciento del volumen de producción de frío comercial e industrial se fabrica en Andalucía, contando con una mayor concentración de empresas de este sector del frío en la localidad cordobesa de Lucena y su comarca, catalizadores de un importante nicho de generación de empleo con cerca de 3.000 puestos de trabajo directos y volúmenes de facturación cercanos a los 500 millones de euros.
Así, desde el inicio de la pandemia y hasta hoy, las empresas que integran la Asociación de Fabricantes Andaluces de Refrigeración se han puesto a disposición de las distintas instituciones para aportar componentes de difícil localización o para dar soporte técnico a sectores vitales como la alimentación, las telecomunicaciones, la sanidad y la industria farmaceútica.
Entre sus acciones hay que destacar la aclimatación de urgencia de hospitales de campaña, como los de Ifema y Zaragoza, el diseño de equipos de refrigeración, ventilación, purificación de aire y la fabricación de mascarillas y pantallas protectoras para el personal sanitario.
Además, las empresas cuentan con muchos años de experiencia y la tecnología necesaria para conservar la vacuna contra el virus covid-19 a la temperatura que sea requerida por las compañías farmaceúticas que la desarrollen.
PERSONAL SANITARIO
Con la emergencia sanitaria ocasionada por el covid-19, se ha puesto de manifiesto la relevancia de este derecho social, el derecho a la protección de la salud, y la importancia de contar con un buen sistema sanitario público.
Esta crisis sanitaria ha puesto a prueba el Sistema Nacional de Salud, donde la población ha podido evidenciar el compromiso y la responsabilidad de los profesionales sanitarios, enfermeras, médicos, auxiliares, celadores, ambulancias, fisioterapeutas, personal administrativo, personal de limpieza, de cocina, de radiodiagnóstico, de mantenimiento, de laboratorio y microbiología, de psicología y del resto de áreas que dieron apoyo a los asistenciales.
Los sanitarios españoles se han convertido en el símbolo de todas las personas, instituciones y empresas que luchan contra esta pandemia. Ellos han sido capaces de ir más allá de lo que exige la profesionalidad, acompañando y reconfortando a los que han tenido cerca la enfermedad. A ellos les dedicaron sus aplausos cada tarde los miles de cordobeses con agradecimiento infinito por lo que dieron, lo mejor de sí mismos, su entrega. Personas dispuestas a transmitir fuerzas y ánimos a los enfermos, más allá de sus propios miedos.
