El Ayuntamiento de Córdoba, a través de la concejala de Promoción de la Ciudad, Marián Aguilar (PP), y la directiva de la Federación de Asociaciones Vecinales de Córdoba Al-Zahara, presidida por Antonio Toledano, junto a representantes de los consejos de distrito Centro y Sur, llegaron ayer a un acuerdo para instituir un mecanismo permanente, una reunión a mantener los primeros miércoles de cada mes, para debatir, consensuar y fijar los grandes acontecimientos a celebrar en la ciudad, particularmente en el Casco Histórico, en donde en los últimos años el malestar de los residentes se ha disparado por la acumulación de eventos (tanto públicos como privados) no coordinados con los vecinos.
El acuerdo se adoptó ayer, durante un encuentro que, en principio, tenía como objetivo por parte del Ayuntamiento informar a la directiva de Al-Zahara y a los consejos de distrito de los pormenores de todo el dispositivo conjunto para la celebración de la Magna Nazarena, con seis Vía Crucis el próximo viernes y 31 itinerarios procesionales simultáneos en el Casco Histórico el sábado, un acontecimiento cuya magnitud ha llevado a medidas extraordinarias que supondrán, entre otras consecuencias, el cierre en la práctica al tráfico rodado de la totalidad del Centro durante horas ante una afluencia prevista de más de 200.000 asistentes.
La concejal de Promoción de la Ciudad respondió con la propuesta de este nuevo mecanismo de coordinación a las quejas largamente formuladas por Al-Zahara sobre la insoportable carga de actos festivos en el Casco Histórico que merman la calidad de vida de sus vecinos, como también viene denunciando el Consejo de Distrito Centro, además de agravios como los que recuerda el Consejo de Distrito Sur respecto al caos de tráfico y aparcamientos que se sufre en la zona cuando hay grandes eventos ciudadanos en el entorno.
Dispositivos para la Magna
Al respecto, y centrándose en la próxima Magna Nazarena, motivo inicial de la reunión, Marián Aguilar dio cuenta de los pormenores de los distintos dispositivos desplegados para el acontecimiento como seguridad, ordenación vial, emergencias, accesibilidad de los vecinos o la limpieza. Antonio Toledano, y pese al acuerdo final que viene a paliar las causas del malestar vecinal manifestado repetidamente, recordó que en este caso la información, nuevamente, llega sin tiempo para ser analizada y para que los vecinos participen en la organización y planteen alternativas, lo que no deja de ser un agravio más tras una situación que se ha repetido los últimos años (por ejemplos, en la planificación de la Semana Santa), y no sólo con la Administración local.
Ante las quejas de Al-Zahara la edil se comprometió a, en la medida de lo posible, ampliar medidas para minimizar las molestias a los vecinos. "Quizá lo que mayor preocupación haya producido sea la política de hechos consumados que se ha tenido al organizar actos en el Casco Histórico, pero es muy importante que esta dinámica cambie", manifestó tras la reunión Antonio Toledano, coincidiendo con la concejala Aguilar en la trascendencia del acuerdo alcanzado para frenar un malestar ciudadano disparado los últimos años.
