Con "estupor", "sorpresa" y también "indignación" ha recibido Andalucía Entre Tod@s la intención del Ayuntamiento de Córdoba para postularse como Capital Verde Europea, y, aunque "lo extraño" es que ninguna otra ciudad haya querido posicionarse, "una capital como la nuestra, con los déficits tan enormes de arboleda que tiene, sin un plan director todavía, aún en diseño, no sabemos qué le vamos a contar a la UE para conseguirlo", ha indicado su portavoz en Córdoba, Manuel Ortega, quien ha considerado que se trata más bien del "típico posicionamiento centrado en el postureo al que nos tienen acostumbrados" el alcalde, José María Bellido (PP), y su equipo de gobierno local.
Se trata de saber qué tipo de documentación se le ha podido adjuntar a la solicitud para acreditar que Córdoba puede aspirar a ser una capital verde, "cuando la impresión que nos da es que es una capital marrón", ha añadido. Y no es una declaración fortuita y sin fundamento, ya que sólo hace falta "pasear por nuestras calles para darse cuenta de la inmensa cantidad de alcorques vacíos o con tocones que hay, y no vale la excusa de decir que están esperando al Plan Director de Arbolado para rellenarlos, porque eso nos parece una barbaridad".
Por el momento, y en opinión de Manuel Ortega, la ciudad lo tiene todo en contra para lograr ese objetivo: Un plan director de arbolado inexistente; unas podas abusivas y fuera de temporada, "con el reconocimiento incluido de que hay podas de Semana Santa para facilitar que los pasos circulen"; sin política de recuperación de islas verdes, por lo que "predominan las islas de calor brutal, cuando se observan calles enteras en el Casco Histórico que son verdaderos secarrales al sol, hornos sin sombra de ningún tipo"; un Casco con una ingente cantidad de solares abandonados sin uso, "que podrían ser reconvertidos en espacios renaturalizados", cuando no existe la ratio recomendada por Cecil Konijnendijk, silvicultor urbano y profesor de ecologización, del 3-30-300, es decir que todas las personas deberán ver al menos tres árboles desde su hogar, los vecindarios deberán tener al menos un 30% de cobertura vegetal y las personas no deberán vivir a más de 300 metros de un parque o espacio verde público de calidad.
En este punto, Manuel Ortega ha advertido que no valen los árboles que se acumulan en los parques del llamado Cinturón Verde, porque no son válidos para cumplir esa norma. Por todo ello "nos parece una verdadera tomadura de pelo que el alcalde se postule para esa Capitalidad".
Pero es que, aparte de talar árboles y hacer malas podas, no se ha hecho nada en estos últimos cinco años, salvo intervenciones que han supuesto "eliminar el bosquecillo de moreras que había en Lepanto con más de 70 u 80 años, por mucho que digan que vamos a plantar árboles de gran porte, ¿por qué no recuperarlos y salvarlos?", se ha preguntado.
Otro elemento en contra es que no se ha declarado Parque Natural la Sierra de Córdoba. Una cuestión que ha sido planteada a varios grupos municipales y que han mostrado un cierto acuerdo con esta iniciativa que supondría garantizar en el término municipal "un ecosistema lo más sostenible posible y dejar de fomentar, como hasta ahora, la urbanización depredadora totalmente insostenible debido al crecimiento demográfico disparado en ese espacio natural".
Eso ha conllevado, según Ortega, el secado de manantiales, que no había ocurrido hasta ahora, con una explotación fraudulenta del agua "que ya se ha denunciado ante el Seprona y se han establecido multas, pero se seguirá haciendo porque esas multas no van nunca más allá".
Además del natural estupor, "nos causa indignación" que se "juegue con cuestiones esenciales para la salud" como es el plan de alerta que ha establecido el Gobierno central por cuestiones de calor, porque "no olvidemos que el exceso de calor, y aquí hablamos de islas de verdor y de sombras, provoca más fallecimientos y afecta a la calidad de vida".
Y ya que la petición es ante la UE, no esta de más recordar que el gobierno local del PP "funciona a modo de imaginario en el cuento del Rey Desnudo, no hace absolutamente nada más allá de lo que es cortoplacista y ahora, en plena campaña electoral europea, hablarán de que son la Vía Andaluza cuando sabemos que si pactan y se alían en gobiernos con filofranquistas que están en contra de la comunidad histórica de Andalucía, de andalucistas tienen bien poco".
Para Manuel Ortega, conviene que en las elecciones europeas "los partidos que se apoyen en partidos dictatoriales y negacionistas de la Agenda 2030 o negacionistas del cambio climático no obtengan una mayoría", porque ya han avisado que van a derogar todas las iniciativas que la UE está desarrollando "para garantizar una economía más sostenible, ecológica y donde las personas puedan disfrutar de la salud y no verse abocados a perderla por criterios meramente mercantilistas y neoliberales".
