A pesar de los muchos actos y frentes a los que tiene que atender, el presidente de la Agrupación de Hermandades y Cofradías de Córdoba, Francisco Gómez, nos atiende con una tranquilidad sorprendente teniendo en cuenta que es el principal portavoz de una de las fiestas más relevantes de la ciudad. Afirma no estar nervioso porque el trabajo está hecho y ya sólo queda mostrarlo.
Me imagino que a estas alturas nervioso…
Bueno, nervios no hay, lo que hay es cierta responsabilidad. El trabajo está hecho y aunque estemos trabajando, la verdad es que disfrutamos de nuestra Semana Santa, que es una semana para disfrutar y para compensar ese trabajo que se realiza en las hermandades todo el año y que en una semana se pone en la calle. Y con muchas ganas de que empiece todo para ver cómo discurre.
Y como todos los años, mirando al cielo
La verdad es que sí, porque las previsiones no son muy buenas para los primeros días pero vamos a confiar.
Este año, como novedad, todas las hermandades pasarán por la Catedral. Es un logro para la Agrupación…
Más que para la Agrupación para todas las Hermandades, puesto que la reivindicación de poder realizar estación de penitencia en la Santa Iglesia Catedral viene de mucho tiempo atrás y para nosotros, efectivamente, es un año muy especial.
El carácter cordobés impregna la Semana Santa sin quitar por ello que haya guiños a otras capitales
Aún queda la cuestión de la segunda puerta de la Mezquita-Catedral
La segunda puerta que nos permita un paso fluido dentro del templo y que realmente nos permita abordar el tema de un posible traslado de la carrera oficial a la Catedral.
¿Qué destacaría de la Semana Santa cordobesa?
La Semana Santa de Córdoba es la de la ciudad, la de los cordobeses; cada ciudad tiene su Semana Santa con sus particularidades y el carácter cordobés impregna la Semana Santa sin quitar por ello que haya guiños a otras capitales en nuestra forma de procesionar, de montar los pasos, pero siempre con el carácter serio que tiene esta ciudad.
“Que el cordobés sienta como más suya la Semana Santa, quizá sea el aspecto a mejorar”
¿Cuáles son los retos que debe asumir la Semana Santa cordobesa?
Todo es mejorable en esta vida y nuestra Semana Santa también y en este sentido hay muchas cosas que tenemos que mejorar, entre otras cosas, pues quizá un apoyo más claro y más decidido por parte de los propios cordobeses e incluso de aquellas instituciones que habitualmente se benefician de la Semana Santa y que no tienen la colaboración que sería deseable con las propias hermandades, pero sobre todo que el cordobés sienta como más suya la Semana Santa, quizá sea el aspecto a mejorar y luego siempre hay posibilidades de mejorar lo patrimonial y lo estético y la posibilidad de cambiar la carrera oficial a un entorno único como es el de Santa Iglesia Catedral.
¿Temen que se agolpe la gente en la Mezquita-Catedral y la aglomeración reste emoción al paso de las procesiones?
Bueno, a día de hoy la venta de sillas en carrera oficial y en palcos avanza incluso a mejor ritmo que en años anteriores, lo cual nos hace pensar que va a haber un púbico, un número de ciudadanos que van a seguir disfrutando de la Semana Santa en la carrera oficial y no temo esa posible aglomeración porque va a ver gente repartida por toda la ciudad porque las estaciones de penitencia son muy largas y mientras hay Hermandades que están en el entorno de la Catedral hay otras en carrera oficial, con lo que la gente va a estar repartida aunque evidentemente el atractivo que tiene la Catedral va a hacer que mucha gente se desplace allí, pero para eso están los planes de seguridad y los dispositivos que se van a montar con el fin ese, que esto sea una cosa controlada que no suponga ningún peligro ni ningún riesgo para ningún ciudadano ni para ningún visitante.
Es un año también electoral. ¿Tiene previsto presentarse de nuevo a la Presidencia de las cofradías?
Ahora mismo estamos centrados en terminar primero con la celebración de esta Semana Santa. Una vez que pase, se tomará una decisión, pero es verdad que hay equipo, hay fuerzas y hay ganas y eso quiere decir que sí.
