Córdoba CF y RDC Mallorca se citan, este viernes, (20.00 horas, El Arcángel) en el partido correspondiente a la Jornada 14 de Liga. Cuando perder se hace insostenible. Cuando toca rendir cuentas del traje (3-0, Almería) del pasado domingo. Cuando quedan al aire las vergüenzas del equipo. Cuando a la palabra ganar se le carga de acepciones molestas como: rascar la escarcha de despropósitos que viene acumulando el equipo seis partidos seguidos, dar salida al atasco de crónicas que necesitan cerrar con tres puntos y final. Y todo, para recuperar la fe profunda en una victoria que debe ser prometida en el cielo, cuando allí se dirija la última mirada antes de que el esférico eche a rodar.
Regresa el Córdoba CF a un Reino Califa que no está para milagros; tiritando, a acogerse al sagrado de una afición divina que no celebra una victoria de su equipo en casa desde la Jornada 7 (2-0, Nástic, en el lejano Septiembre). “Con la confianza intacta” del técnico tras el horroroso viaje a los Juegos del Mediterráneo para no olvidar. Y no precisamente por bueno; sino para no cometer los mismos fallos de concentración, consistencia, intensidad, paciencia, criterio,… ¿o es que acaso a este equipo no se le puede pedir más? ¿O es que no hay más? Oltra responde que sí. Que hay, que se puede confiar; lo que implica seguir soñando. Ganar, de hecho, le asegura cama para descanso en ascenso directo.
Momento, pues, de quitar vendas y evaluar, ante la hinchada, una racha de 4 puntos de los últimos 18; inédita sangría que solo la vuelta de Domingo Cisma consigue calmar, en algo, la intranquilidad con la que se viven estas horas previas. Este qué pasará de interrogantes continuos en el que anda sumido el Córdoba CF. La vuelta del carrilero, pues, constituye lo positivo de cara a un partido que se prevé vital y complejo.
Cisma, Pablo Vázquez y Marc Vito, en la convocatoria
A la cita con la urgencia, los blanquiverdes llegan mermados. Tanto por sensaciones en su juego como por bajas. Apunten, 5: Razak (convocado por su selección, Ghana); Deivid y Rodas (cumple ciclo de amonestaciones) en defensa; Marcokiv en la medular, y Piovaccari (de tres a cuatro semanas) arriba. Del primer equipo, Oltra dispone de 16 jugadores para recibir al RCD Mallorca. La convocatoria la completan los dos jugadores del filial, el central Pablo Vázquez por Héctor Rodas y Marc Vito por Razak.
Las ausencias siguen planteando en la defensa una reforma obligada. Otra jornada, que vuelve a provocar en el técnico el mismo rompecabezas. Para no perder ante el RCD Mallorca, Oltra tiene solo a Bijimine del primer equipo como central puro. Por tanto, la incógnita, se cierne sobre quién acompañará al de Amiens en sustitución de Rodas. Dos opciones tiene José Luis Oltra: o da la alternativa liguera al chaval, Pablo; o apuesta el todo a la polivalencia de Caro. De jugar el estepeño como central, Antoñito podría ser de la partida ocupando la banda derecha. La presencia titular de Cisma tampoco está segura. Ha entrenado con normalidad, por lo que, a priori, parece que estará; pero el técnico no quiso confirmarlo en rueda de prensa.
De no estar de inicio, Samu está preparado. De cualquier modo, que el sevillano esté en condiciones de aportar debe ser ya considerado una buena noticia. Menos trastoque parece que presenta en la delantera la baja de Piovaccari. Al menos, José Luis Oltra no ha querido o no ha necesitado echar mano al filial (Alberto Quiles) para suplir su falta. Si no hay sorpresas en las demás líneas, Kieszek en la portería; la medular con Luso y Caballero; línea de tres con Edu, Juli y Alfaro; y arriba la casta y calidad de Rodri.
Un RCD Mallorca en línea ascendente
En el otro bando, el RCD Mallorca, no vendrá a poner las cosas fáciles a El Arcángel. Plantel que domina, genera ocasiones pero que le cuesta matar; los bermellones son un equipo confeccionado para otras alturas (ocupa la plaza 14 con 15 puntos; pero, ojo, a tres solo del Córdoba CF). Eterno candidato, y van tres años; han marcado cuatro goles en sus últimos dos partidos y en su última visita arañaron un empate (a dos) en el Nou Estadi ante el Nàstic. Los mallorquines llegan a Córdoba dejando atrás un mal inicio y ahora suman una derrota (Levante) en los últimos cinco partidos. Van a más. Eso sí, fuera no ha ganado todavía y desean romper la tradición de equipo débil a orillas del Guadalquivir: solo han ganado dos veces en 12 visitas. Lejos de su estadio, el conjunto bermellón sufre momentos preocupantes de desconexión en los partidos que esperan ser rentabilizados por los cordobeses.
Para dar la vuelta a la situación y a la historia, el conjunto entrenado por Fernando Vázquez solo tiene un baja, aunque es importante. La de Campabadal en el flanco izquierdo, pieza fuerte. Por lo demás, el RDC Mallorca viene con todo. Y con Brandom. El hombre de moda en las islas, el gol balear y la preocupación de Oltra sin sus dos centrales titulares. Llamado a dar muchas alegrías a la afición mallorquina. El 11 de Santanyí ya sabe lo que es marcar en el Arcángel. La temporada pasada marcó el tanto de su equipo (3-1) en el último antecedente del enfrentamiento entre bermellones y blanquiverdes.
Para mantener el buen tono, el once de Vázquez sobre el verde del coliseo califa, variará muy poco del expuesto en Son Moix en su último encuentro (2-2, ante el Zaragoza). Un 4-3-3 con Santamaría como guardián; Company (por Campabadal), Yuste, Raíllo y Oriol; Juan Domínguez, J. Rodríguez y Culio; y arriba la artillería: Moutinho, Lago y Brandom.
