Córdoba CF

Una vorágine peligrosa

La derrota en Pucela, quinta en siete partidos, agrava el aciago inicio tras otro tropiezo rotundo

Real Valladolid-Córdoba
photo_camera Kiesezk trata de cubrir una internada de Mata FOTOS: TWITTER DEL REAL VALLADOLID

El ridículo en Pucela costó imaginarlo. Los más positivos, por lo doloroso. Los más escépticos, por lo imprevisible del Córdoba CF o del fútbol, nunca se sabe. La ilusión, el 'vamos', el 'hoy toca', el 'sí o sí', el 'no va más', duró un cuarto de hora. Y un silencio. Uno tras otro. Cuatro sentencias duras. De Valladolid a Córdoba. Concentrados en tres, en algo más de media hora, de lo que supuso el quinto horror de la temporada. Irregular en tramos de partidos, cada vez más regular en la derrota y cada vez peor. Se lleva la segunda derrota consecutiva en Liga, tercera si contamos la Copa. Con once goles en contra, qué barbaridad, en tres ofrendas a la debilidad y a la duda. Tan vulnerables, tan que no son nada, que es difícil magnificar o intentar resolver hasta donde, qué consecuencias, la debacle en tierras manchegas.

Ejercicio de puesta en situación. Los mismos que perdieron en Los Cármenes. La novedad de Caro por Fernández. Bien asentados. Pucela a la iniciativa y los califas, de rosa, a la presión alta. Atando las piernas e imaginación vallisoletana. Muy juntos, con Jona y Sergi Guardiola descolgados arriba ejecutando el esquema de dos puntas, de resultado tan dispar en Liga y Copa. Misma idea; idéntica fragilidad. No llegaba al quince, costó predecirlo con lo visto, cuando al Córdoba CF le hicieron un tremendo roto. Por el centro de la defensa, Salvador se encontró solo ante Kieszek, tras un amago excelso que dobló a Josema y puso el primero en el marcador. A la primera aproximación de los blanquivioletas. Al primer error de los blanquiverdes. Sin perdón, de unos y otros.

Tres goles en media hora

Aquí todo se hunde. Y al Córdoba CF cuando le marcan, viendo siendo norma, se difumina. Lo que sigue, sin embargo, no costó imaginarlo. El gol cambió la idea califa, la de esperar y salir. Tumbó el plan de inicio y soltó el avance de líneas. El Córdoba CF, obligado, consintió otro escenario distinto a la entrada que apenas puso en marcha. Solo diez minutos después de encajar el primero, fue muy cruel encajar un gol olímpico. Otro fallo. Entre las dudas de Caro y Kieszek, y el buen golpeo de Óscar Plano. Entre los tres, sentenciaron. Dos a cero antes de la primera media hora. En la segunda aproximación de los de Luis César. En el segundo error de los de Carrión. El segundo. ¿Y ahora qué?.

Pues el Córdoba CF noqueado en dos golpes, a la espera de una difícil reacción. En el peor de los imaginables. Sumido en el desorden y asumiendo que en Pucela tampoco sería. Salvador tuvo el tercero en un zurdazo lejano que rozó la escuadra de Kieszek, mientras los califas, débiles, en el eterno intento, en la tibieza, rotos, flojos, deshechos, superados, sin contener las cómodas llegadas del Real Valladolid. Se vio venir. El festín pucelano. El autentico desastre lo firmó Jaime Mata en un mano a mano con Kieszek tras un primer toque y una zaga califa desguarnecida. Aún más cruel. Minuto treinta y cinco. Tres goles a cero ante los ojos de Deivid y Antoñito. Todo por los suelos y la segunda por jugar. Eso pasó.

Guardiola cumple con el gol por tercera vez consecutiva

Con todo perdido, Carrión sacó lo que tenía. Los que salían de una lesión; y les dio toda la segunda. Hombres ofensivos, Lara y Jovanovic, por un central, Josema, y un Alfaro desaparecido, como todo el Córdoba CF. Y Edu Ramos al eje de atrás. La jugada del serbio, recién dentro, fue oportuna y letal. Si había alguna opción de que los blanquiverdes tuvieran la opción de competir era la de marcar pronto. Pues bien, Sergi Guardiola (tres jornadas seguidas marcando) empujó el regalo de Jovanovic para recortar distancias en el cincuenta y cinco. Lo celebró con rabia. Expectativa. Y Caro, al saque de falta de Lara, la tuvo, clara, para hacer el segundo. El tanto bisagra para amedrentar y tener opción. Que no llegó.

Tuvo más control con Lara. También ante un Real Valladolid guardando su botín y sin ansia ni necesidad de marcar. Un quiero y no puedo califa, un paso beneficioso de los minutos para los vallisoletanos. La expulsión rigurosa de Edu Ramos descompensó la posible reacción blanquiverde. Favoreció aún más los boquetes. Por si quedaba alguna duda, Luismi hizo el cuarto. Cruzó un pase de la muerte de Mata, que volvió a ganar a Joao. El quinto lo salvó Kieszek a Gianniotas. También lo tuvo Villa. Una tras otra. Pidiendo el final, el Córdoba CF, devastado por otro equipo que fue superior y monopolizó el balón y la alegría hasta el noventa. Que debió llegar mucho antes. Que se apareció en media hora. A nadie le hacen más goles que a este Córdoba CF. Y nadie, solo él, puede revertir la situación.  

DATOS DEL PARTIDO

REAL VALLADOLID: Masip, Antoñito, Olivas, Deivid, Ángel, Luismi (min. 76, Cotán), Borja, Hervías (min. 69, Gianniotas), Salvador (min. 70, Toni), Óscar Plano y Mata.

CÓRDOBA CF: Kiesezk; Caro, Joao, Josema (min. 46, Javi Lara), Pinillos; Edu Ramos, Aguza, Javi Galán, Alfaro (min. 46, Jovanovic); Sergi Guardiola y Jona (min. 63, Jaime Romero).

ÁRBITRO: Ocón Arráiz. Comité Riojano. Amonestó por el equipo visitante a Edu Ramos y Aguza. Expulsó por doble amarilla a Edu Ramos (min. 67). 

GOLES: 1-0 (min. 13) Salvador. 2-0 (min. 22) Óscar Plano. 3-0 (min. 35) Jaime Mata. 3-1 (min. 51) Sergi Guardiola. 4-1 (min. 71) Luismi. 

INCIDENCIAS: Partido correspondiente a la Jornada 7 de La Liga 1|2|3 disputado en el Estadio Municipal José Zorrilla ante 8. 613 espectadores.

Real Valladolid-Córdoba 5

Real Valladolid-Córdoba 2

Real Valladolid-Córdoba 1