En tres puntos se llega a Córdoba, ¡Mallorca qué cerca estás! En pleno vuelo hacia quién sabe dónde, divagando, perdiendo altura en la tabla, se cruzan. Córdoba y Mallorca. Se van a estrellar. Como dos aviones que el radar no encuentra, con el rumbo atrofiado a merced de una tormenta de resultados, resistiendo al aterrizaje. Decididos hacia su destino, ¿el ascenso? Conscientes de que si llegan, quedarán en anécdota las inclemencias de este trayecto liguero plagado de empates y turbulentas derrotas. Agárrense. Ambos equipos son acumuladores de emergencias que no consiguen despegar.
No disfruta del vuelo este RCD Mallorca que busca el hangar de El Arcángel Los mallorquines son de aquellos equipos diseñados para Primera que permanecen como observados en una probeta; que no reaccionan. Mezclados en un por qué continuo. Esperando que Fernando Vázquez, su técnico, dé con la fórmula que consiga sacar todo el potencial que por historia, plantilla y por propia exigencia se le da por supuesto. Son dos años congelados en una Liga 123 de candidato estatua. Este RCD Mallorca, por tanto, no está para experimentos. Necesita ganar fuera de su estadio y aún no lo ha hecho. El viernes, a las 20: 00 horas, tendrá otra oportunidad; pero no muchas más, aquello de la urgencia en fútbol, entiéndase, ante el Córdoba CF.
Empiezan a perder los nervios en la isla con ellos. En su último partido, en casa ante el Zaragoza (2-2), Vázquez recibió pitos desde una grada agitada que pide resultados. Y es que el equipo, de 4-3-3 con gusto, llega; y genera, y domina, y pica; pero no mata. ¡Ay, los dichosos goles! “¿Me lo dices o me lo cuentas?”, pensará Oltra. Y las jornadas pasan. Y los bermellones son decimoquintos con 14 puntos y no acaban de romper. Y las Baleares desesperan e, histéricas, observan rodeadas de agua por todas partes que el Córdoba CF hace agua por todas partes sin juego al que agarrarse, con problemas en defensa y seis partidos sin ganar. Y entonces nadie se fía de nadie. Se citan en el barro. Lo que tenga que pasar.
Solo dos victorias en sus doce visitas a Córdoba
Los cordobesistas, con 4 de los últimos 18 puntos posibles, afilan navajas de plástico, tocan trompetas desafinadas bajo un murmullo de psicosis. El Arcángel aguarda desde la distancia, chasquea sus nudillos y mira la situación de los mallorquinistas guardando para dentro el “conozco a este enfermo y su enfermedad”. Las sensaciones, pues, de ambos equipos, claman. El RCD Mallorca tardó cinco jornadas en ganar y esperó otras cuatro para volver a hacerlo. De esta manera, el equipo balear solo ha ganado 4 partidos de 13 y ha empatado 6. Suman 5 puntos de los últimos 15 y fuera de Son Moix está inédito, no gana.
Huésped bondadoso desde la 82-83, temporada de su última victoria en Córdoba (0-3, Jornada 34), los bermellones solo han ganado 2 veces en sus 12 visitas a la ciudad de los califas. Y al blanquiverde, gris por la angustia, se le escapa aquella sonrisita de esperanza de que el RCD Mallorca pudiera ser la primera piedra para olvidar la mala racha. El rival propicio, dice la tradición, para empezar a remontar.
